9/12/18 | Carta de un hincha de River que vivió la final en el Santiago Bernabeu

Un hincha festejando
Un hincha festejando / Gonzalo Arroyo Moreno/Getty Images
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El 9 de diciembre del 2018 será un día que los hinchas de River no olvidaremos. Le ganamos la final de la Copa Libertadores a Boca y el recuerdo quedará en nuestra memoria para toda la vida. Tuve el placer de ser testigo y de disfrutar la victoria más importante en la historia de mi club.

El 24 de noviembre había estado en el Monumental en la final que no fue. Aquel día, se vivía un clima nunca veces visto en las callas de Núñez. Todo era fiesta, alegría y muchísimos nervios. Las bengalas y los cantos se hacían presentes en las afueras y la gente estaba lista para vivir un partido histórico.

Dentro del Monumental, en una tarde de muchísimo calor, nos enteramos de lo que había ocurrido con el micro de Boca. La euforia se comenzó a apagar y la espera se hizo eterna. Finalmente el partido se suspendió y la sensación de decepción fue total.

El partido se iba a jugar el día siguiente, pero la euforia ya no era la misma. Sensación de tristeza y de bronca . Nos habían robado la final y por dentro sabía que ese día no se iba a jugar. Finalmente terminó ocurriendo y terminamos yendo a jugarla a Madrid.

Era una locura. Era otra verguenza de la Conmebol. Era un nuevo capítulo de como arruinaron el fútbol. Era muchísimas cosas negativas, pero no dejaba de ser una final contra Boca y allí tenía que estar.

En mi vida hice muchas locuras por River. Viajes de 30 horas en micro, dejar muchas cosas de lado y sabía que no podía faltar. "Vas a ser complice de esta vergüenza", me dijeron. Lo que no sabían es que iba a ser testigo de la final más importante.

Madrid no fue el Monumental, pero los que estuvimos presentes quisimos ser los mejores representantes. El banderazo en el día anterior, el sufrimiento en los 90 minutos y el desahogo con el triunfo.

El recuerdo de lo vivido en la final quedará por la eternidad. "Los hijos de tus hijos hablarán de este partido", recitaban los carteles en las calles el día siguiente. Fue la final más importante de la historia a nivel clubes y allí estuve. Gracias River y gracias jugadores por semejante alegría. Será eterna.