A día de hoy es imposible imaginar la defensa merengue sin Ramos y Varane
Por Adrían Marcos
Todos los medios afines al conjunto blanco se hacen eco hoy de una noticia en la que aseguran que el central francés estará en la lista de transferibles el próximo mercado de fichajes ante su falta de interés por renovar y la posibilidad de hacer caja con su salida. Este hecho podría pasar más desapercibido, como su salida, si la situación de Sergio Ramos fuese óptima, pero con el camero aún por renovar, se antoja complicado pensar en cómo sería una defensa del Real Madrid sin ambos.
El capitán merengue llegó al club en verano de 2005 y, si no alcanza un acuerdo con Florentino Pérez, podría marcharse tras 16 temporadas, y Raphaël Varane aterrizó en el Bernabéu en 2011, con tan solo 18 años. Un fichaje muy parecido el de ambos pues tan solo habían disputado una temporada en la élite cuando llegaron, uno en el Sevilla y el otro en el Lens, una apuesta de futuro que ha salido muy bien en ambos casos y que podría tener un final conjunto.
Después de tanto tiempo en el que nadie más que Pepe ha sido capaz de desparejar ese binomio entre Ramos y Varane, parece complicado que llegue un día en el que ninguno de los dos esté. Sin embargo, la posible llegada de David Alaba estaba claro que podía significar un relevo para cualquiera de los dos. Primero era el español quien tenía todas las papeletas para hacer las maletas y ahora cualquiera podría hacerlo.
Es evidente que, sea Alaba o cualquier otro, la marcha de ambos debería suponer la llegada de dos centrales de garantías pues a día de hoy ni Éder Militão ni Nacho Fernández están listos para defender el área merengue durante toda una temporada. Desde la cantera ha comenzado a entrar en las convocatorias Víctor Chust, pero aún debe foguearse como suplente durante los próximos cursos por lo que quizá una revolución en el vestuario le vendría bien.
El austriaco es la opción más posible, pero si Ramos, Varane o los dos terminan saliendo, se abriría un amplio abanico de posibilidades donde Jules Koundé es el mejor situado por su presente y, sobre todo, por su futuro, y Pau Torres el otro, que se presenta como el futuro de la zaga de la 'Roja'. A día de hoy es difícil imaginar una nueva defensa sin el '4' y el '5', pero todo se andará y, como suelen decir, cuando lleguemos a esos ríos, cruzaremos esos puentes.