Achraf Hakimi a lo ''panenka'' manda a la selección española a casa antes de tiempo

No hubo sorpresas en el España vs Marruecos. El partido siguió el guion esperado. España situada en campo rival con balón, y Marruecos esperando en bloque bajo para intentar cazar alguna contra. Probablemente el once de Luis Enrique no fue del todo efectivo, pues hubo jugadores como Marcos Llorente que estuvieron desaprovechados hasta que introdujo una variante que le lanzó más arriba. Con esto retrasó a Pedri para que jugase prácticamente como lateral cuando España estuviese instalada en campo rival.

Del partido no se puede comentar mucho. Marruecos practicó el llamado ''Antifútbol''. Parecido al partido que Polonia hizo contra Argentina con todo el equipo encerrado atrás sin querer casi ni marcar goles, solo aguantar y aguantar para que pase el tiempo. La única diferencia es que Argentina tenía a Messi en sus filas para poder desatascar el partido... Ver partidos así te quitan las ganas de ver fútbol, porque no es un partido igualado entre dos equipos. Es uno racaneando y otro intentado.

Tras 90 minutos sin ocasiones claras, la prórroga iba a ser quien decidiese quien iba a ser el equipo que llegase a los cuartos de final de la Copa del Mundo. España intentó, jugó, creó, regateó, centró, remató pero no consiguió romper el cerrojo que planteó el equipo marroquí. Por lo que tuvo que ser la tanda de penaltis de la que había hablado Luis Enrique en la previa del partido quien hiciese justicia. España no consiguió marcar ni un solo penalti y Achraf Hakimi en el penalti decisivo a lo ''panenka'' mandó a la selección española de vuelta a casa.