Balón de Oro 1995: la vez que George Weah hizo historia para África
Por Pablo Falcones
Hasta la década de 1990, el Balón de Oro era un premio exclusivamente reservado a futbolistas europeos. La revista France Football sólo premiaba a los jugadores nacidos en nuestro continente, lo que en su día había dejado sin premio a grandísimos genios de este deporte. Todo cambió en el año 1995.
En dicha edición, George Weah rompió la baraja. El liberiano fue galardonado con el Balón de Oro y se convirtió no sólo en el primer jugador africano en ganarlo, sino en el único en haberlo hecho hasta la fecha. 24 ediciones más se han vivido, y ningún jugador de dicho continente ha sido capaz de emular al bueno de Weah.
Sus inicios en Europa: Wenger, el Monaco y el Paris Saint Germain
Weah había dado el salto a Europa de la mano de un entrenador mítico como Arsène Wenger. El galo se lo llevó a su Monaco en la temporada 1988-89 y ya desde el primer momento demostró que era un jugador diferente. Un goleador muy completo, con una arrancada y una potencia descomunales. En sus 4 años en el Principado, logró una Copa de Francia y fue subcampeón de la Recopa contra el Werder Bremen.
Entonces fichó por otro grande de la Ligue 1, el Paris Saint Germain. Vale que no era lo que es ahora, pero con Weah al mando los capitalinos ganaron en 1994 la primera liga de su historia. Todo un hito, que casi culminan con una Recopa que hubiera supuesto un doblete impensable en esos momentos para el Paris Saint Germain.
En total, Weah estuvo 7 años en la Ligue 1 entre estos dos clubes. Disputó con ambos 276 partidos y marcó 121 goles, casi nada. Pero lo más importante es que dejó una huella imborrable en ambos. Los hizo grandes por primera vez. Así lo atestiguan los 5 títulos que logró y el recuerdo que todavía se tiene allí del liberiano.
El Milan, el gran salto a la eternidad de Weah
El año 1995 fue el que definitivamente llevó a George Weah a la eternidad del fútbol. En verano fichó por el Milan de Capello, equipo referente en ese momento en el continente que dominaba Italia y era un grande de Europa. En diciembre recibiría la mayor distinción individual de su carrera.
Sí, fue galardonado con el Balón de Oro. El primero para un jugador no europeo en la historia. El único hasta la fecha de un africano. Weah había roto una barrera que difícilmente alguien podrá igualar en los próximos años
El fin de su carrera y la presidencia de Liberia
Fue en el Milan donde vivió sus últimos días grandes de fútbol. Estuvo cinco años en los que jugó 147 partidos y anotó 58 goles, ganó dos Scudetti pero le faltó la Champions. Posteriormente apuraría su carrera en el Chelsea, City, Marsella y Al-Jazira, equipo en el que se retiró en 2003 después de 18 años como profesional. 588 partidos y 280 goles convirtió en ellos, entre clubes y selecciones
Posteriormente Weah no dejó la vida pública. Siempre se preocupó por la situación de su país, Liberia. Un Estado sumido en guerras civiles desde hace mucho tiempo y del que George siempre quiso sacar su lado más humanitario. Otro gran hito en su vida es que en 2018 se convirtió en el Presidente de Liberia, cargo que sigue ostentado. ídolo dentro y fuera del campo.