Cinco cosas que no sabías de Agustín Ruberto, el goleador argentino del Mundial Sub 17

Agustín Ruberto fue el gran protagonista de Argentina en las semifinales de la Copa del Mundo Sub 17 frente a Alemania, que terminó con derrota por penales luego del 3 a 3 en el tiempo reglamentario del choque disputado en el Manahan Stadium, de la ciudad de Surakarta.

El delantero de River Plate marcó el hattrick del combinado dirigido por Diego Placente y ahora buscará alcanzar el mejor registro histórico de la competencia que es propiedad del nigeriano Victor Osimhen, en el duelo por el tercer puesto. Repasamos aspectos que seguramente no sabías sobre el goleador argentino que promete.

1. Toda una vida en River

Ruberto, que cumplió los 17 años en enero, suma ¡12! en las Inferiores de River Plate. Aún no debutó como profesional, pero tiene un contrato en el Millonario desde comienzos del 2022 cuando firmó hasta diciembre del 2024.

2. Sus características, descriptas por él mismo

“Me considero nueve de área con buen juego aéreo, le pego con las dos piernas, pivoteo bien”, declaró en la previa del Mundial Sub 17, y no fue un acto de demagogia: lo demostró en este certamen, y sobre todo en el choque de semis contra Alemania, ya que marcó un hattrick con todo ese repertorio.

3. Es el máximo goleador de este Mundial y va por un récord

Sus ocho gritos ya lo convirtieron en el máximo artillero del Mundial en soledad, pero quiere ir por más y tiene la gran chance de igualar al actual delantero del Napoli Victor Osimhen, quien sumó 10 gritos para Nigeria en la edición del 2015 que terminó con su equipo en lo más alto. Será en el duelo por el tercer puesto ante Mali, que cayó en la otra semifinal ante Francia.

4. ¿Quiénes son sus ídolos?

"De River el que me gustaba mucho era Borré, porque va a todas. De afuera me gusta Robert Lewandowski, porque es un jugador muy técnico”, explicó el Gigante (1.80 metros y 74 kilos) en diálogo con La Máquina Radio.

5. Ahora es delantero, pero su carrera comenzó como defensor

A los cuatro años comenzó a ir al club Barrionuevo de baby fútbol ubicado en la zona de San Fernando, provincia de Buenos Aires. Dos años más tarde Pablo Espiñeira, uno de los captadores de talentos de Parque Chas, quedó obnubilado por este chico, que en ese momento ¡era defensor! y sacaba mucha diferencia por su potencia física. Ya en River, Fabián Mazza decidió probarlo como centrodelantero notando su técnica, y como la potencia ya la tenía, terminó siendo una combinación perfecta para ser "9".

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