Cinco razones detrás de un nuevo fracaso de Boca en la Copa Libertadores: mal plantel, poca actitud y más

Boca cayó sin atenuantes ante Santos y se quedó sin su gran objetivo. ¿Qué hubo detrás de esta dolorosa eliminación?

1. No arriesga

Boca tiene un libreto que muchas veces le ha salido bien a lo largo de la etapa de Russo, pero que no le alcanzó para ganar la Copa: mantener el orden atrás y esperar que los rapiditos de arriba la metan. No arriesga, no sabe jugar con la pelota y una vez que se encuentra abajo en el marcador, no tiene plan B.

2. Sin actitud

"La actitud no se negocia" es una frase hecha pero válida para cualquier equipo con aspiraciones de ser campeón. Y Boca solo la tuvo en esta Copa contra Racing en la vuelta. No apareció ante Inter en la revancha en la que tuvo que ir a los penales para clasificar ni contra Racing en la ida y mucho menos en los dos encuentros ante Santos.

3. Jugadores muy por debajo de su nivel

Salvio era el jugador más desequilbrante de Boca hasta hace poco tiempo, pero sus últimas actuaciones lo colocan como uno de los máximos responsables de la eliminación. Villa juega un partido para el 10 como contra River y luego desaparece. A Fabra lo superaron en todos los duelos, Soldano es un 9 que no hace goles y Jara demostró que no está para jugar en Boca.

4. Mal armado del plantel

Boca salió a jugar una semifinal de Copa Libertadores con un jugador que en el último año no jugó más de 5 partidos como Pulpito González, con un 9 como Soldano que corre a todos pero que no la mete y con un 4 como Jara que es desbordado permanentemente y que no aporta en ataque. Sobraban jugadores en ciertos puestos (Wanchope y Zárate en el banco), pero en otros no había ni siquiera un titular a la altura de la exigencia.

5. Malas decisiones de Russo

"Son decisiones", suele decir Miguel Ángel. Y en esta Copa muchas le jugaron en contra. Boca necesitaba un jugador en cancha como Cardona, y el DT nunca le encontró el puesto. Contra Santos jugó en el medio con Campuzano, que llegaba en malas condiciones físicas, y con Pulpito González, un jugador que no se sabe cómo llegó a Boca, dejando afuera a Capaldo, quien se había ganado la titularidad por entrega y despliegue. Insistió con Soldano y no supo cambiar a tiempo. "Soy el responsable, me hago cargo de todo", aseguró en conferencia de prensa, con mucha razón.