¿Cómo Pelé cambió la historia del futbol?
Por Arturo Du León
El pasado jueves perdió la vida en Brasil Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como Pelé, a causa de un cáncer de colon.
El legendario jugador brasileño escribió su nombre en letras de oro en el futbol mundial. Será recordado por todo lo alcanzado y por las hazañas realizadas.
¿Cómo Pelé cambió la historia del futbol?
Y es que Pelé logró lo que ninguno, que se amara el futbol y que Brasil fuera la potencia futbolística que hoy se conoce. Con él se creó el llamado 'jogo bonito', mismo que sigue cautivando a generaciones.
Antes de Pelé el futbol era sólo un deporte, pero con la incursión del astro brasileño, las personas comenzaron a amar el balompié.
Como bien lo comentó el noruego Erling Haaland, 'todo lo que ves haciendo a un jugador, él lo hizo primero', y tiene toda la razón. Pelé era portador de un físico impresionante, así como el de CR7, su técnica depurada era como la de Messi, sus dribles como los de Ronaldinho y la potencia de sus disparos como los de Ronaldo Nazario.
Pelé era un jugador todoterreno, de esos que ya no se ven. Era una máquina dentro del campo que ponía a temblar a todos los defensas, quienes no sabían con qué habilidad se les presentaría en los mano a mano el brasileño.
Pelé llevó el juego por todo el mundo, él fue el responsable de que millones fueran seguidores de Brasil sin ser brasileños, todo gracias a su magia con el balón. Te puede o no gustar el futbol, pero todo mundo conoce a Pelé.
Cada que jugaba 'O Rei' las actividades se detenían, todos querían ver ese agradable futbol y ese balón corriendo por las piernas morenas de Pelé. Y lo más importante, dentro y fuera de las canchas el futbolista era único, su humildad y su agradecimiento a Dios era el plus para conquistar a la gente.
Hoy murió el 'Rey', pero dejó su nombre grabado en todo el planeta. Se le puede comparar con otros más, aunque nadie logrará lo que él hizo, y no tanto en los palmarés, sino en la magia con la que consiguió que el mundo amara al futbol. ¡Hasta siempre, Pelé!