Cristiano Ronaldo y De Gea sentencian a un Villarreal que mereció ganar en Old Trafford

El Manchester United y el Villareal se volvían a enfrentar, apenas 4 meses después de la histórica final de Europa League que supuso el primer título de siempre para los amarillos (1-1 y 11-10). Hoy el equipo español fue mejor, pero salió de vacío de Old Trafford por culpa de los dos jugadores más decisivos del United: David de Gea y sobre todo, Cristiano Ronaldo.

Un partido al que los red devils llegaban después del batacazo de la jornada 1 de Champions, en la que perdieron contra el Young Boys (2-1). Lo cierto es que el Villarreal mostró un desparpajo tremendo en la primera parte, liderado por un Danjuma sensacional. La increíble actuación de De Gea, con cuatro paradones espectaculares, impidió que los amarillos abrieran el marcador.

Cristiano Ronaldo había sido el único de los locales que había generado algo de peligro, con un cabezazo que se le marchó alto al comienzo y un remate escorado fácil para Rulli, igual que un tiro de Pogba. Muy poco bagaje para los de Old Trafford, que dejaban mucho que desear. Eso sí, Alberto Moreno salvaba un pase con veneno del francés a Greenwood justo antes del descanso.

Hubo que esperar hasta el comienzo de la segunda parte, pero el Villarreal encontró su premio. Cómo no, Danjuma desbordó por banda a un Dalot al que volvió loco, y sirvió en bandeja el gol a Paco Alcácer. Justicia. Pero el United es un equipo grande y nunca se le puede dar por muerto.

En una jugada a balón, tras falta de Albert Moreno, Telles enchufaba a la perfección una volea cruzada desde fuera del área. Gentileza de Bruno Fernandes al saque. Esto espoleó al equipo de Solskjaer, que apunto estuvo de remontar en la siguiente jugada pero Pau Torres llevó a cabo una intercepción fundamental a Pogba.

El campo estaba volcado hacia el área grogueta, y Greemwood volvía a poner a prueba aun buen Rulli. El Villarreal intentaba salir a la contra, pero parecía que su momento ya había pasado. Cavani, que acababa de entrar, fallaba incomprensiblemente un cabezazo con el meta argentino ya batido.

El que no perdona nunca es Cristiano Ronaldo. Esta es su competición. Había tenido un partido discreto, y después de otra jugada salvada por De Gea, sentenció al Villarreal. En el último instante, un balón no despejado ni por Rulli ni por la zaga amarilla la remachaba el portugués para salvar a los suyos. Era increíble, pero el Villarreal no iba a sumar ni un sólo punto en un partido en el que debió ganar. De Gea y Cristiano le privaron de ello.