De la tranquilidad a la calculadora: atento Boca, que si te confiás quedás eliminado de la Copa Libertadores
Es cierto que apenas han transcurrido tres fechas de las seis que tiene la fase de grupos de la Copa Libertadores de América, que empezar a hacer cuentas desde ahora no tendrá mucho sentido ya que en los partidos que restan se pueden dar muchas combinaciones distintas que determinarán la suerte de cada equipo.
Es verdad que Boca Juniors llevaba cinco victorias consecutivas antes de la caída de anoche ante Barcelona de Ecuador, de las cuales dos se habían dado en el marco del Grupo C del certamen continental, por lo que el "Xeneize" llegaba a enfrentar al conjunto de Guayaquil con puntaje perfecto.
No es mi objetivo alarmar ni agrandar una derrota, para nada, pero muchas veces en el fútbol las competencias se terminan definiendo por algunos detalles en ciertos partidos, y la realidad es que el equipo de Miguel Ángel Russo pasó de ubicarse primero con tranquilidad a observar la tabla de posiciones con otra tesitura y a la expectativa de lo que pueda ocurrir en las semanas entrantes.
Es que Boca cayó ante un Barcelona que sigue imparable, y que con 9 de 9 mira a todos desde arriba, y ahora el Santos de Brasil, al que el equipo azul y oro derrotó con comodidad en la segunda jornada en La Bombonera, amenaza con poder arrebatarle el segundo lugar tras su goleada 5-0 a The Strongest, en la antesala de recibir al elenco boquense la próxima jornada en el Estádio Vila Belmiro Urbano Caldeira.
El "Xeneize" sabe bien cómo es la Copa Libertadores, nadie necesita explicarle a un equipo copero por excelencia de qué manera hay que encarar cada partido, pero a sabiendas de que uno imagina que Barcelona se cortará solo al superar al equipo boliviano en la fecha 4, el partido de Santos-Boca pasa a ser un encuentro más que trascendental.
Es que si el "Peixe" le gana se pondrá en la misma línea que su rival (el segundo puesto transitorio dependerá de la diferencia de gol de cada uno), y Boca le dará vida a un contrincante que parecía descartado hace apenas una semana atrás, sobre todo teniendo en cuenta el alejamiento de su entrenador Ariel Holan.
Todo esto sumado al ya mencionado equipo revelación de la competencia hasta aquí, ya que no solo Barcelona acumula tres victorias en igual cantidad de encuentros, sino que además no ha encajado goles en lo que va del certamen, por lo que es muy complicado imaginar que Boca pueda arrebatarle la primera posición.
Esto es fútbol y debido a sus sorpresas es que nos apasiona tanto: lo que ayer podíamos imaginar utópico, hoy puede ser posible y mañana tiene chances de darse vuelta por el simple hecho de ser fútbol.
No es un alerta, pero Boca debe tener cuidado. Tiene seis Copas Libertadores en su historia, pero al mismo tiempo hace casi 14 años que está pujando por la séptima y aún no la puede lograr. Para ello, deberá superar primero la fase de grupos, que se puso difícil. Porque esto es la Copa.