Diego Lainez ya se ganó el derecho a exigir más titularidades
Por Carlos Alberto Pérez García
El crecimiento es notable. Diego Lainez ha dado un paso adelante en su desarrollo y ha aprovechado las múltiples bajas que tiene el Betis en su plantel para demostrar que su desequilibrio, desparpajo y mentalidad son vitales para los intereses del equipo dirigido por Manuel Pellegrini.
Son dos partidos consecutivos como titular para Lainez y en ambos ha influenciado de manera notable en el desarrollo del partido, en la generación de oportunidades, asistencias e incluso ya estrelló un balón al poste. Su participación es constante y a pesar de no ser el hombre clave todavía, ahora ya puede decir con mayor autoridad que merece ser titular en los partidos siguientes.
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Cuando fue sentenciado al banquillo la temporada pasada, las razones eran claras, pues se notaba a kilómetros su falta de disciplina táctica y su dificultad para decidir de manera correcta con el balón, algo que cada vez se difumina más en sus últimos juegos y que solo demuestra los beneficios de emigrar pronto al fútbol europeo.
La llegada de Pellegrini le cayó perfecto al desempeño de Lainez, pues además de ganar masa muscular, también ha adquirido otro tipo de confianza sobre el campo. Ya tenía ese desequilibrio constante y desborde, pero sus movimientos sin balón han dado un salto de calidad, la búsqueda de espacios es más inteligente, cada vez genera mayor atención y preocupación en sus rivales y su sacrificio defensivo ahora es constante.
Terminó el juego para Diego Lainez. Otra vez titular, otra vez siendo de lo mejor del Betis. Disputó 83 minutos. Estuvo cerca de convertir (disparo en el poste) y cerró su actuación con una recuperación/asistencia. Crecimiento notorio en su toma de decisiones y trabajo defensivo. pic.twitter.com/WNOwJBHzb9
— Invictos (@InvictosSomos) January 6, 2021
En términos concretos, Diego Lainez le está aportando un dinamismo brutal que no tenía el Betis de Pellegrini, está logrando oportunidades más peligrosas que antes y genera faltas cerca del área. Esos tres aspectos son esenciales en cualquier equipo y son credenciales suficientes para afirmar que se ha ganado un puesto de titular.
Que la meritocracia se haga presente, que la confianza en los jóvenes se demuestre con acciones y que el progreso de Lainez continúe como un habitual sobre la cancha, porque eso sería hacer justicia al rendimiento notable de un futbolista necesitado de oportunidades.
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