El Atlético de Madrid sufre como sólo él sabe (una vez más) y se acerca al título de liga

Los jugadores del Atlético de Madrid celebran un triunfo capital en su pelea por la liga
Los jugadores del Atlético de Madrid celebran un triunfo capital en su pelea por la liga / Denis Doyle/Getty Images
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El Atlético de Madrid tenía hoy una oportunidad de oro para dejar la liga vista para sentencia. Y no, hoy no la ha dejado escapar. Hizo un gran encuentro ante la Real Sociedad, y a pesar de que tuvo que sufrir al final con el gol de Zubeldia, consiguió un triunfo que lo acerca mucho al título (2-1).

Porque la salida de los de Simeone fue en tromba, con ocasiones muy claras de Luis Suárez, Marcos Llorente y Correa. Así tienes que salir cuando te estás jugando la liga, y más después del pinchazo de ayer del Barcelona contra el Levante (3-3). A la cuarta fue la vencida. Carrasco ganaba un balón dividido tras un córner y sorprendía a Remiro por debajo de las piernas.

La intensidad de los locales no bajaba, y después de una gran jugada de Luis Suárez era Correa quien dejaba el marcador muy a su favor. Gran partido el del uruguayo, aunque negado de cara a puerta. Con el marcador tan amplio, Simeone decidió que darle la pelota a los de Imanol no era mala idea. Eso no quiere decir que sufrieran, aunque con alguna excepción.

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Correa celebra su gol / PIERRE-PHILIPPE MARCOU/Getty Images

Oblak hizo dos grandes paradas a Isak, especialmente la segunda. Aún así estaba más cerca el tercero que el primero de los visitantes. Pero lo dicho, hoy no era el día de Luis Suárez. La segunda parte fue parecida, con posesiones de una Real poco peligrosa. Se notaban las ausencias de Mikel Merino y Silva, y además Imanol quitaba al descanso al propio Isak, su hombre más incisivo hoy.

Parecía que iba a ser un día plácido, pero con el Atlético de Madrid hay que sufrir hasta el final. No se entiende ser seguidor del club sin ello. Tras dos claras ocasiones de Portu, una de nuevo salvada por el inmenso Oblak y otra al poste, llegaba el gol de Zubeldia. Diez minutos de infarto esperaban.

Pero en esa zona, la del sufrimiento, no hay casi nadie como Simeone y los suyos. Se cerraron a la perfección y no dejaron crear peligro a la Real. El final del partido llegó para ellos como agua de mayo y la victoria se celebró casi como un título. Casi como lo que es. La liga está mucho más cerca.