El Atlético no consigue sobrevivir al vendaval Red
Partido de alto voltaje el que se iba a disputar en Anfield, después de la primera toma de contacto en el Wanda Metropolitano y los intercambios en rueda de prensa que habían tenido Simeone y Klopp, sabíamos de antemano lo que podía pasar antes de empezar el encuentro.
El Liverpool salía al encuentro a morder, típico de los equipos de Jurgen y trece minutos le fueron suficientes para hacer el primero, Diogo Jota que suplía a Firmino adelantaba a los Reds. Había tres centrales del Atlético y un solo delantero del Liverpool, pues Jota, el más listo de la clase, se aprovechaba del error de Felipe al rematar un centro de Arnold, que tuvo todo el tiempo del mundo para elegir donde ponerla.
No le dio tiempo al Atleti a recuperarse del primer golpe y ya estaba recibiendo el segundo. Felipe volvía a ser el protagonista (una vez más para mal), Mané rompía, abrió para Alexander-Arnold y se anticipaba en el primer palo para poner el segundo. El Atleti mejoraba por momentos después de encajar los dos goles pero una vez más, Felipe volvió a ser protagonista, y sí, otra vez para mal. Salía Mané a la contra y el portugués en el intento de frenarle pisa por detrás al jugador senegalés y Makkelie no dudó en llevarse la mano al bolsillo y expulsarle.
No tuvo suficiente el Atleti en la primera mitad, que nada más empezar la segunda, empezó despistado y encajó el tercero, Jota otra vez, pero el VAR entraba para corregir.El Liverpool dejaba con vida al Atleti después de derrochar dos ocasiones claras y en el fútbol el que perdona, lo paga. Luis Suárez aparecía para rescatar al conjunto rojiblanco, pero al igual que con el tercero de Diogo, el VAR entraba para anular el primer tanto colchonero. Simeone y Klopp movían ficha, uno para buscar un gol que le metiese en el partido, otro para controlar más la posesión de balón.
Acabó muriendo el partido en una acción de Mateus Cunha, robaba y salía rápido para atacar la portería de Alisson pero Matip, frenaba la jugada de manera muy fea. De Paul se encargaba de ejecutarla y la mandaba al limbo, el disparo de Rodrigo definió el partido del Atlético de Madrid. El 2-0 fue el que finalmente quedó en el marcador, complicando las cosas más de la cuenta para Simeone que queda como tercero de grupo y con unas sensaciones muy malas de cara al próximo tramo de la temporada. Si te vas perdiendo habiendo jugado bien, vale. Pero el Atleti se va de Anfield con 0 puntos, sin haber jugado bien y con la sensación de no haber sabido manejar ninguno de los dos partidos ante un grande de Europa. Si sales a jugar en Europa como salió el Atleti es lo mínimo que te puede pasar.