El Barcelona 08/09 vs el Manchester City 22/23: ¿Cuál de los tripletes de Pep Guardiola fue mejor?

"No puedo hacer nada más para superar esto".

Esa fue la reacción de Pep Guardiola tras completar el triplete europeo con el Barcelona en 2009. Técnicamente, Guardiola tenía razón. En España, es imposible ganar más de los tres trofeos principales (Liga, Copa del Rey y Liga de Campeones) en una temporada.

Puede que no haya sido capaz de superarlo, pero Guardiola podría esforzarse por repetir ese éxito. Le costó 14 años, dos cambios de trabajo y todo su pelo, pero el hijo de un humilde albañil regresó a esas alturas en 2023 con el Manchester City.

Sólo otras ocho personas han llevado a su club a conquistar el triplete europeo, y Guardiola es el primero que lo ha logrado dos veces. Pero, ¿qué triplete ha sido mejor?

Viaje hace el Triplete

Aunque el Barcelona de Guardiola de la temporada 2008/09 tiene un registro ligeramente inferior al del City (dos puntos menos), obtuvo resultados más contundentes en la primera vuelta del triplete.

Los blaugrana no sólo arrollaron a equipos en apuros, sino que impusieron su autoridad sobre la élite de la división, derrotando a siete de los ocho primeros clubes por un margen de al menos tres goles. Y lo que es más impresionante, el Barcelona ejerció su dominio a domicilio, endosándole un infame 6-2 al Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

Por el contrario, el Manchester City sólo logró una victoria fuera de casa contra los nueve primeros de la Premier League en 2022/23: un 3-1 sobre el Arsenal en el Emirates que podría haber decantado fácilmente la balanza hacia cualquier lado.

Tanto el Barcelona como el City fueron ligeramente fortuitos en sus respectivas finales de la Liga de Campeones. Sir Alex Ferguson mantiene que su Manchester United "debería haber ganado ese partido" en Roma contra el Barcelona en 2009, mientras que el City se apoyó en la brillantez de Ederson (la desgracia de Romelu Lukaku) en la final contra el Inter 14 años después.

Sin embargo, el camino del City hasta la final fue mucho más convincente que el del Barcelona. La última generación de Guardiola desmanteló sistemáticamente al RB Leipzig y al Bayern de Múnich antes de protagonizar una de las actuaciones más destacadas de la era moderna, humillando al Real Madrid con un contundente 4-0 en el partido de vuelta de semifinales.

El Barcelona, por su parte, sólo pudo clasificarse para la cita de 2009 con un gol de Andrés Iniesta en el último minuto de la semifinal contra el Chelsea. Según Didier Drogba, fue una "vergüenza".

Tácticas y estilo

Tras poner fin a su carrera como jugador en Europa, Guardiola lamentó que el fútbol moderno hubiera evolucionado.

"Creo que los jugadores como yo nos hemos extinguido porque el juego se ha vuelto más táctico y físico", suspiraba en 2004. "Si yo tuviera 20 años en el Barcelona, nunca triunfaría".

Sin embargo, un puñado de años después, Guardiola construyó a los ganadores del triplete del Barcelona a su imagen y semejanza. Los tres centrocampistas -Andrés Iniesta, Xavi Hernández y Sergio Busquets- crecieron idolatrando a Guardiola desde sus tiempos de futbolistas. El estilo de juego posicional que implantó como entrenador cambió la balanza de la fuerza muscular a la inteligencia. El uso de Lionel Messi como falso nueve hacia la segunda mitad de la temporada no hizo sino aumentar el dominio del Barcelona en el centro del campo.

Sin embargo, existe la posibilidad real de que Guardiola no pueda encajar en su equipo ganador del triplete, el Manchester City.

Cuando el Barcelona se alineó en la final de la Liga de Campeones de 2009 contra el Manchester United, Guardiola sólo alineó a un central natural. Contra el Inter, 14 años después, envió a cuatro desde el pitido inicial.

En su interminable búsqueda por eliminar por completo la amenaza de los contragolpes, Guardiola ideó una nueva innovación: formar un trapecio 3-2 como base del fluido quinteto delantero del City, con John Stones entrando en el centro del campo junto a Rodri por delante de un trío robusto: Manuel Akanji, Rubén Dias y Nathan Aké.

Rodri es lo más parecido a Guardiola en el equipo del City, pero aporta una capa extra de músculo y amenaza en ataque a un conjunto más robusto. A Guardiola le gusta bromear sobre su escaso registro goleador como jugador, con 12 goles en 384 partidos con el Barcelona. Rodri ha visto puerta 13 veces en las tres últimas temporadas, incluido el gol de la victoria contra el Inter en la Liga de Campeones.

Jugadores clave

Tras poner fin a su carrera como jugador en Europa, Guardiola lamentó que el fútbol moderno hubiera evolucionado.

"Creo que los jugadores como yo nos hemos extinguido porque el juego se ha vuelto más táctico y físico", suspiraba en 2004. "Si yo tuviera 20 años en el Barcelona, nunca triunfaría".

Sin embargo, un puñado de años después, Guardiola construyó a los ganadores del triplete del Barcelona a su imagen y semejanza. Los tres centrocampistas -Andrés Iniesta, Xavi Hernández y Sergio Busquets- crecieron idolatrando a Guardiola desde sus tiempos de futbolistas. El estilo de juego posicional que implantó como entrenador cambió la balanza de la fuerza muscular a la inteligencia. El uso de Lionel Messi como falso nueve hacia la segunda mitad de la temporada no hizo sino aumentar el dominio del Barcelona en el centro del campo.

Sin embargo, existe la posibilidad real de que Guardiola no pueda encajar en su equipo ganador del triplete, el Manchester City.

Cuando el Barcelona se alineó en la final de la Liga de Campeones de 2009 contra el Manchester United, Guardiola sólo alineó a un central natural. Contra el Inter, 14 años después, envió a cuatro desde el pitido inicial.

En su interminable búsqueda por eliminar por completo la amenaza de los contragolpes, Guardiola ideó una nueva innovación: formar un trapecio 3-2 como base del fluido quinteto delantero del City, con John Stones entrando en el centro del campo junto a Rodri por delante de un trío robusto: Manuel Akanji, Rubén Dias y Nathan Aké.

Rodri es lo más parecido a Guardiola en el equipo del City, pero aporta una capa extra de músculo y amenaza en ataque a un conjunto más robusto. A Guardiola le gusta bromear sobre su escaso registro goleador como jugador, con 12 goles en 384 partidos con el Barcelona. Rodri ha visto puerta 13 veces en las tres últimas temporadas, incluido el gol de la victoria contra el Inter en la Liga de Campeones.

Conclusión

Ambos jugaron un fútbol increíble y merecen formar parte del "selecto grupo de equipos míticos" que Guardiola describió en 2009. Aunque el Barcelona presumía de más estilo y libertad, no llegó a la imperiosa marcha hacia los tres títulos que impulsó al City.

De todos modos, ninguno de los dos equipos fue tan bueno como el Barcelona de 2010/11 que creó Guardiola, aunque perdiera la Copa del Rey contra el Real Madrid de José Mourinho.