El Barcelona y Depay invitan a los culés a soñar tras superar a la Juve por 3 a 0 en el Gamper
Fue un Joan Gamper amargo. Sin demeritar ni mucho menos la figura de Sergio Busquets, a todos los culés se les apretó un poco más ese nudo de la garganta que vienen arrastrando desde hace unos días. No ver a Leo Messi en la presentación del equipo es duro, da la sensación de que falta algo, que todavía queda un último giro de guión propio de película mala. Pero no, se ha ido y estamos ante el inevitable e insospechado final más triste posible.
Fuera del ámbito sentimental hay que admitir que el partido del Barça estuvo muy por encima de lo esperado. Además del resultado, que contra toda una Juventus con la gran mayoría de sus jugadores titulares está más que bien, el equipo fue dueño y señor del partido en todo momento.
Nada más comenzar el choque ya se adelantó el equipo de Ronald Koeman tras una gran jugada de Yusuf Demir que cedió para que Memphis Depay definiera a la perfección. El segundo gol vino tras un centro del delantero neerlandés que fue cabeceado por Braithwaite, y el tercero, tras una jugada muy precisa de toque alrededor de todo el campo que acabó con un zurdazo de Riqui Puig que olía a tributo a Messi.
Las sensaciones del juego fueron mucho más positivas que negativas. Además hay que recordar que dos de los mejores jugadores del equipo no están disponibles como son Pedri y Frenkie de Jong. El próximo domingo 15 de agosto debutará el Barça en el campeonato liguero frente a la Real Sociedad, partido clave para evitar repetir el descalabro que se vivió a comienzos de la pasada campaña.
El Barcelona cuenta con una plantilla mucho más profunda de lo que se está comentando, pero es cierto que ahora mismo los culés no pueden pararse a pensar en los jugadores de su equipo, pues todos siguen debatiéndose en esa interna dicotomía entre la negación y las lágrimas por el que ha sido y será el más grande.