El día que Maradona boxeó contra un campeón del mundo

Diego Armando Maradona fue un auténtico apasionado del futbol. Ganó todo lo que quiso en las escuadras donde militó y es uno de los máximos referentes y leyendas a nivel internacional, donde también fungió en su retiro como director técnico; sin embargo, una de las facetas que pocos conocieron sobre el 'Pelusa' fue su incursión en el boxeo.

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Fue en 1996 cuando Maradona decidió ponerse los guantes para cumplir una promesa realizada a su amigo Santos Benigno Laciar, quien en ese entonces era ex campeón del mundo en el ámbito del pugilato. La ciudad de Córdoba, Argentina, presenció el día en que el futbolista argentino subió al cuadrilatero en calzoncillos amarillos y una careta para medir fuerzas ante su compañero de toda la vida, esto para festejar los 15 años de haberse coronado como campeón de la Asociación Mundial de Boxeo.

'Falucho', como también se le conocía en el boxeo a Laciar, solicitó al 'D10S' que subieran juntos a dar una función de boxeo. La respuesta por parte de Maradona fue positiva y no dudó en aceptar la pelea que sería un espectáculo de exhibición para los aficionados de ambos deportes. El jugador mencionó en entrevista que no temía a su amigo aunque fuera el primer campeón mundial que dio Argentina.

"Una gran responsablidad pelear con 'Falucho', yo sé que tiene un poco de miedo de enfrentarme. Yo di la categoría también muy bien (entre risas). Creo que es lindo hacerle un homenaje en vida a la gente que lo merece", comentó en su momento Maradona en entrevista.

La pelea fue pactada a 3 rounds y poco más de mil asistentes se hicieron presentes para ver a Maradona con el torso desnudo y pesando 75 kilogramos, a diferencia de su oponente que pesó en la báscula 62. El jugador argentino imitó movimientos de boxeadores profesionales, y en un momento chusco golpeó al referi quien era el comediante Miguel de Sel.

Al finalizar la contienda, se le pasó un balón a Diego Armando Maradona para cerrar el espectáculo con dominadas y haciendo jugadas vistosas con la pelota. El público aplaudió y se rindió en elogios por haber presenciado un suceso inédito, que fue el día que la leyenda colgó la camiseta y los botines para enfundarse en un calzoncillo y en guantes de boxeador.