El Manchester City arrolla al Nottihngam Forest con exhibición de Haaland y doblete de Julián Álvarez
Lo que hace el Manchester City es admirable. Es el fútbol con balón y sin balón llevado a la perfección, es atacar y defender con la posesión, es dejar indefenso a su rival y anular todas y cada una de las armas que tiene. Lo que hace este equipo es único en el mundo, no hay nadie que pueda repetir esta fórmula. Guardiola ha hecho de un grupo de jugadores un grupo de estrellas. Porque cada jugador tiene su función, cada jugador es protagonista y siempre con una misma intención. Hacer daño al rival.
El Nottingham Forest se fue con un saco de goles del Etihad Stadium. Lo que era un partido histórico por la vuelta de este equipo a la Premier League (desde 1999 no disputaba la competición), se convirtió en todo un recital sobre lo que tiene que hacer un delantero centro sobre un terreno de juego. No hay nadie como Erling Braut Haaland sobre el planeta Tierra. Es un jugador que siempre huele el peligro, que no aparece siempre en la elaboración del Manchester City, pero que con tres toques de balón, fue capaz de marcar sus dos primeros goles del partido. No es casualidad que el balón siempre llegue donde está Haaland, el olfato que tiene es élite. Solamente le hicieron falta 37 minutos para marcar su segundo hat-trick en una de las ligas más difíciles del mundo. Había dudas sobre si iba a ser complicada su adaptación al fútbol inglés, pero han quedado más que solventadas.
Joao Cancelo también se unió a la fiesta con un zapatazo espectacular desde la frontal del área. El portugués pese a no hacer uno de sus mejores partidos, volvió a demostrar que es un jugador adelantado a su época. Es una mezcla entre un lateral, un mediocentro y un extremo. Uno de los jugadores con más movilidad del mundo. Indetectable. De la misma manera que el argentino Julián Álvarez que ha empezando su andadura en el Manchester City de la mejor manera. Anotó un doblete en su primera titularidad bajo las órdenes de Guardiola. El primero aprovechando un balón filtrado de Mahrez y el segundo y último del partido culminando una contra poniéndola lejos del alcance de Henderson. El City cerró la fiesta durmió de nuevo como segundo clasificado de la Premier.