El 'Matador' Cavani ya ha aterrizado en Old Trafford
Llegar y besar el santo. Edison Cavani ha caído de pie en el conjunto de Manchester.
Tras un final amargo en la ciudad del amor, el delantero uruguayo puso rumbo a Manchester el pasado mes de octubre, con la esperanza de hacerse un hueco en el reñido ataque de los diablos rojos. Después de una decena de partidos disputados (si contamos el cómputo de los minutos no alcanza ni cinco completos), está empezando a demostrar que sigue siendo ese delantero salvaje e intratable que lleva una década maravillando al mundo.
Todos estamos de acuerdo en que Cavani es un auténtico crack, pero…¿Qué puede aportar a corto plazo a su nuevo club? Pese a su cartel de estrella va a precisar de algo de paciencia y trabajo para convertirse en un fijo en los onces de Ole Gunnar Solskjaer, que si por algo se caracterizan es por su variación y diversidad.
Como suplente
Como pudimos observar el pasado domingo frente a los “saints”, el técnico noruego conoce a la perfección su faceta de desatascador de partidos. 45 minutos le bastaron para dar una asistencia, enchufar dos goles y conseguir tres puntos que se antojaban más que complicados. Siempre ha sobresalido por su capacidad de concentración, y es muy cierto que no es fácil gozar de esa conexión tan intensa con el juego, lo que le permite ser útil para la gran mayoría de distintos escenarios que puedan darse dentro de los noventa minutos.
Como titular
El Manchester United llevaba tiempo sondeando el mercado en busca de un nueve rematador, un goleador puro, porque por muy buenos que sean Rashford, Martial o Greenwood, son jugadores demasiado similares, tanto en sus virtudes como en sus carencias, como para formar un tridente fiable a nivel de efectividad. Si bien es cierto que hablamos de tres jugadores increíbles (más si cabe Rashford) también lo es que ninguno de ellos es lo que lleva tiempo buscando el club, un goleador nato. Una cosa no quita la otra.
Un aliciente más que me hace pensar en Cavani como uno de los líderes del ranking de goles a final de temporada es el dorsal 18 de su equipo. El nivel que lleva ofreciendo Bruno Fernandes desde que debutó con la elástica de los “red devils” roza la inverosímil. El portugués se entiende a las mil maravillas con todos sus compañeros y a base de goles, asistencias y pases imposibles se está convirtiendo en uno de los mejores jugadores del planeta. Si la conexión entre Bruno y Cavani funciona, podemos estar ante una de las duplas del año en Inglaterra.
Afiliado a la escuela de los se dejan el alma en cada choque bajo el lema de “No pain no gain” (algo así como “sin dolor no hay recompensa”). Podríamos definirlo como un obstinado del gol, un hombre incapaz de no partirse la cara por su equipo. Una leyenda en lo suyo.