El partido de la vergüenza: los jugadores de Boca no logran soltar la derrota contra el Santos
Por Eitan Benzaquén
Quedar eliminado en semifinales de la Copa Libertadores es algo posible y está claro que no es una instancia sencilla. Los partidos suelen ser definidos por detalles y siempre llegan grandes equipos.
Para Boca quedar afuera contra Santos fue mucho más grave y no solo por la decepción que significó quedar afuera de una final, sino por las forma en la que cayó derrotado. Un equipo que no estuvo a la altura de las circunstancias y que fue vapuleado en Brasil.
Después del 3-0 y con el comienzo de las vacaciones, los jugadores del Xeneize tuvieron la mala idea de sacar toda su bronca con los medios de comunicación. En tiempos donde el silencio hubiera sido el mejor aliado, los futbolistas realizaron críticas públicas a lo que ocurrió en el campo de juego.
Primero fue Eduardo Salvio, luego llegó la respuesta de Mauro Zárate y ahora el turno del Pulpo González. Los jugadores no pueden ocultar el dolor y demuestran todo lo que sufrieron esta eliminación.
"Me hago cargo de mi parte, los 45 minutos que estuve en cancha frente a Santos no se qué me pasó sinceramente. Jugué mal, ni loco quería jugar así, tuve un día malo. Me dolió mucho que hayan dicho que no tuvimos actitud porque eso no faltó. Lo que nos faltó fue el juego y el buen pase", declaró el Pulpo y aseguró que fueron "un desastre".
Creemos que es tiempo donde los jugadores deben pasar la página y pensar en lo que se viene. El fútbol siempre da revancha y no se pueden quedar con lo ocurrido en Brasil. Todos los equipos tienen malas noches, pero deben resolver los problemas en el vestuario y entender por qué ocurró esa desgracia futbolística. Seguir hablando traerá más problemas y allí debe aparecer la figura de Miguel Ángel Russo.