El Real Madrid dará un golpe a LaLiga si le gana al Espayol
El Real Madrid terminó LaLiga con un correctivo del Real Betis que lo bajaba del liderato. Los blancos han pasado todos y cada uno de los largos días de confinamiento con la cabeza muy alta, hacia arriba, pero no por orgullo, sino para no perder de vista a su gran rival, el Barcelona, que les había arrebatado el liderato. Cada palabra de un futbolista del Santiago Bernabéu durante estos meses dejaba entrever que solo tenían un objetivo: reconquistar la primera posición. No han tardado en hacerlo. Los blancos se colocaron líderes, empatados a puntos con los culés, la pasada jornada, y hoy, tras el empate barcelonista, pueden dar un golpe sobre la mesa en el liderato.
El escenario se antoja perfecto para que los madridistas se alcen hoy con la victoria. Hacer sangre en el estadio vecino del rival. El Real Madrid juega contra el Espanyol con recuerdos de ligas anteriores y tamudazos. Los periquitos no se lo pondrán fácil. Están con el agua al cuello y no pueden permitirse un solo paso atrás o caerán a Segunda División. Esta situación los hace temibles, pero a la vez, evidencia las carencias y las diferencias entre uno y otro equipo. El Real Madrid debe ser el campeonísimo, no tener piedad y sacar el partido con calidad y la fuerza de todos los espíritus combativos de la casa blanca.
Conseguir ganar al Espanyol significaría mucho más que una victoria. El golpe contra el Barcelona podría ser mortal. Tras haberles arrebatado el liderato la pasada jornada, pues les tienen ganado el golaveraje, sacarles dos puntos será una cima demasiado alta para la moral de los culés, un equipo que no carbura, no encuentra juego, no gana y no convence. Además, también antepondría un colchón mínimo entre los dos equipos, los merengues podrán permitirse un empate, en caso de que el Barcelona gane todo.
Esto último se antoja difícil si se dedica un minuto a observar el calendario. Además, como si de un edificio se tratara, el Real Madrid verá que todo queda en cosa de vecinos. Los blancos deben ganar a los vecinos de los culés y en la siguiente jornada deben esperar a que los suyos les hagan un favor histórico. El Barcelona se enfrenta al Atlético de Madrid y, de no conseguir sacar ese partido adelante, el golpe será mortal.