El River de Gallardo tuvo una nueva muestra de carácter en la Copa Libertadores

El River de Marcelo Gallardo volvió a tener una nueva demostración de jerarquía y de mística copera. Sin una actuación brillante, sin pasar como otras veces por encima al rival, le alcanzó para ganarle 2-1 a Sao Paulo y clasificarse a los octavos de final de la Copa Libertadores.

El equipo volvió a demostrar que sabe jugar esta clase de partidos y mostró toda su personalidad. A lo largo de todos estos años se fue generando una mística copera, que quedó reflejada en el campo de juego.

Históricamente a River le costaron los equipos brasileños, pero eso está cambiando y es gracias a la identidad que se generó en la era del Muñeco. Un equipo que se hace fuerte en los momentos difíciles y que saca adelante todo tipo de partidos.

Cambian los protagonistas, pero no cambia la identidad y eso es lo más difícil. River se sostiene con el paso del tiempo y ese es el principal mérito que hay que darle a Gallardo. Después podes perder o ganar, eso es parte del fútbol, pero hay ideales que este plantel no negocia.

Se vienen nuevamente los octavos de final. River sacó adelante un grupo complicado (y más teniendo en cuenta que comenzó con una goleada en contra vs Liga de Quito) y ahora se ilusiona con ir por todo.

Hay quienes dicen que la Copa Libertadores empieza a partir de los octavos de final. Lo cierto es que el Millonario ya demostró que sabe jugar esta clase de encuentros y que dará pelea contra cualquier rival. El tiempo dirá si le alcanza para ilusionarse con ganar el título, pero los hinchas se pueden quedar tranquilos de que tendrán un equipo que estará a la altura de las circunstancias. Gallardo lo hizo y ahora va por más, como siempre lo hizo.