El tridente del PSG deja su huella en su visita a Haifa y siguen invictos en esta Champions League
Empezó sufriendo y de qué manera el nuevo PSG de Galiter. Era inimaginable con el equipo que sacaban los parisinos que fuesen a encajar algún gol, pero lo hicieron. El partido empezó de la peor manera posible para el equipo de Mbappé y compañía. A los 24 minutos de partido Chery aprovechó un centro lateral que se coló por toda la defensa del Saint Germain y remató a bocajarro contra la portería de Donnarumma.
Pero las dudas no tardarían en despejarse. Kylian avisó con un disparo tímido a puerta y solo quince minutos más tarde de encajar el primero, el mejor jugador de la historia del fútbol, Lionel Messi aprovechó una jugada individual de Mbappé y puso el empate rematando a placer en su primer disparo del partido. Tras el ecuador, el partido volvió a ponerse como al inicio, el Maccabi buscando el gol, y el PSG remoloneando. Y pudo salirles caro si no hubiera salido desviado el disparo desde fuera del área de Cornud, pero al igual que en los primeros cuarenta y cinco minutos, Messi y Mbappé se encontraron, esta vez de manera inversa. Mbappé rompía al espacio y Leo le dejaba delante del portero para que definiese a placer al palo largo. El 1-2 subía al marcador.
Con el gol los parisinos decidieron ponerle cloroformo al partido. Salían victoriosos de un escenario difícil, pero Neymar Jr no quería salir de vacío. Viendo que sus dos compañeros del tridente habían estrenado su cuenta goleadora, aprovechó una asistencia mágica de Verrati para cerrar el marcador.