ENTREVISTA EXCLUSIVA 90MIN | Robert Pires relata su odisea triunfal: Marsella, Arsenal, selección francesa y más
Por Pablo Falcones
Robert Pires trabaja como comentarista en Canal Group y en M6 en su país, pero es una leyenda de su selección y del Arsenal. El galo ha concedido una entrevista exclusiva a 90min Francia en la que repasa los momentos más exitosos de una carrera sensacional
¿Qué significa el fútbol para ti?
Desde que tenía 7 años, tengo esta pasión en mí gracias a mi padre. Él fue quien me llevó por ese camino, pero sin pensar en si me convertiría un día en futbolista profesional. Para mí, el fútbol es sobre todo una pasión.
Debutaste en el Stade Reims pero no jugaste mucho. Fue en el Metz donde te diste a conocer. ¿Qué significa ese club para ti?
No tuve suerte en el Stade Reims porque estaba en bancarrota en 1992, cuando estuve allí. Yo era parte del segundo equipo, aunque ocasionalmente entrenaba con los 'mayores'
El problema es que no llegué a debutar. Tuve que irme al Metz y allí me dieron la oportunidad. Confiaron en mí y me dieron la oportunidad de jugar, a pesar de que tenía sólo 19 años
En tu último año allí, brillas a las órdenes de Messin y te convocaron para jugar el Mundial de Francia de 1998. ¿Te sorprendió estar en la lista de 22?
Honestamente sí. En la selección francesa había un grupo muy bueno de jugadores, muy físicos y muy técnicos. Para mí fue una agradable sorpresa estar en la lista de Aimé Jacquet. Creo que le gustaba mi estilo y mi manera de jugar
Entre 1996 y 2000 había muchos jugadores franceses buenos. Era muy difícil entrar en la convocatoria, y tuve que ser muy perseverante, serio y trabajador
Durante el Mundial no tuviste mucha participación, pero lograsteis imponeros en la final. ¿Cómo fue esa experiencia para ti?
En realidad Jacquet ya nos dejó claro al principio que había unos galones dentro del equipo, pero que teníamos que estar listos en todo momento para ayudar. Asumí de muy buena gana mi rol de suplente, éramos un equipo. Queríamos ser campeones del mundo.
Además, aprendí mucho de los jugadores más veteranos. Me ayudó a crecer. No jugué mucho, cierto, pero estar con todos esos futbolistas durante dos meses me ayudó mucho en mi carrera
Pero tuviste un papel decisivo en octavos de final, contra Paraguay
(risas) Ya te digo que sabía que iba a ser teórico suplente. Tenía por delante a un 'tal' Dugarry....Fui importante contra Paraguay porque le di la pelota a Trezeguet, que luego se la puso en bandeja a Blanc para marcar. Gracias a ese gol seguimos nuestra aventura en cuartos. Me gustó ser importante a pesar de no gozar de demasiados minutos
Para ti, ¿había alguien que destacara por encima del grupo?
Es una muy buena pregunta, pero creo que realmente no. Nuestro nivel defensivo en conjunto marcó la diferencia en ese Mundial. Nuestros defensas de aquel torneo literalmente daban miedo, y así era muy difícil que los rivales pudieran hacernos daño
¿Algún jugador te impresionó en ese torneo?
Yuri Djorkaeff era un jugador maravilloso. Tuvo 'mala suerte' (se ríe) porque estaba a la sombra de Zizou. Pero aprendí de él a diario. Era un futbolista muy bueno técnicamente y letal frente al portero rival. Nos dio el toque técnico que necesitaba el equipo en ese Mundial
Ese título fue un punto de inflexión en tu carrera y fichaste por Olympique Marsella. ¿Cómo fueron tus dos temporadas allí?
Sí que lo fue. Cuando me firmaron, el presidente del Metz me dijo "ten cuidado, no sabes a dónde vas" (risas). Pero fue una muy buena opción ir allí. El Marsella es y seguirá siendo un club poderoso de la liga francesa. Me llevé alguna crítica, algún palo, porque la presión allí es mayor, pero me hizo crecer
Hoy en día pasa algo parecido en el Olympique. Yo ya lo experimenté en 1999. No es fácil, pero con momentos duros como el actual es como realmente aprendes y mejoras
En verano de 2000 te llamaron para jugar la Eurocopa. Esta vez ya no te sorprende
(risas) Lo cierto es que no. No me sorprendió, porque durante los dos años con OM me había ido bien a nivel personal. Luego también tuve la confianza de Roger Lemerre, que fue asistente de Aimé Jacquet en 1998. Conocía bien al grupo, a pesar de que cambió a algunos jugadores.
Como en Francia 98, no jugaste tampoco mucho. Pero entraste en la segunda parte en la final, contra Italia. ¿Qué recuerdas de todo aquello?
Cuando veía que nos íbamos a ir de vacío de vuelta a casa, me sentía hundido. Perdíamos 0-1 contra Italia, eso parecía imposible de salvar por norma general contra ellos. Pero empatamos en la última jugada y ganamos en la prórroga. Eso es la magia del fútbol. Los tres cambios de Lemerre funcionaron a la perfección
¿Crees que el equipo del 2000 era mejor que el de 1998?
Sí. La diferencia es que habíamos crecido, nos conocíamos mejor y había más química entre nosotros, tanto dentro como fuera del campo. Por eso creo que era mejor el equipo de 2000, sobre todo a nivel técnico. El listón estaba muy alto
En julio de 2000 empiezas una nueva etapa, en Inglaterra con el Arsenal. ¿Cómo te pusiste en contacto con Arsène Wenger, por qué el Arsenal?
Cuando estaba en el Metz, Arsène ya me había querido para el Monaco, que era el equipo que entrenaba. En el verano de 2000 tenía ofertas de Real Madrid, Juventus y Arsenal, pero Wenger me convenció, porque me aseguró que iba a jugar y para mí era lo más importante
¿Cómo fue ese cambio de la Ligue 1 a la Premier?
Fue complicado, me llevó unos 6-7 meses adaptarme. Había mucho más ritmo, no pasan ningún tiempo de inactividad y es mucho más físico que en Francia
Seis temporadas en el norte de Londres. ¿Cuál es tu mejor temporada a nivel individual y colectivo?
A nivel individual, yo diría que la temporada 2001-02. Sí que es cierto que me rompí el ligamento cruzado, pero también sentía que me salía todo lo que intentaba. No sé por qué.
A nivel colectivo la temporada 2003-04. Fue el Arsenal de los Invencibles, ganamos la liga sin perder ningún partido. Fue algo impresionante por nuestra parte, nadie lo ha hecho nunca en la historia, aunque pienso que tarde o temprano un equipo también lo logrará
¿Cuál era la mayor fortaleza de ese equipo?
Técnicamente estábamos por encima de los demás. Mentalmente también, gracias a los jugadores ingleses. Los extranjeros éramos los finos y ellos los recios (risas)
¿Qué compañero te impresionó más? ¿Y qué rival?
Henry. Yo lo llamaba 'el avión de combate', porque nadie podía pararlo. En los contraataques era un cohete, una locura. He tenido la suerte de jugar con él durante años, ya sea en el Arsenal o en la selección. Para mí, es uno de los mejores delanteros que el fútbol ha conocido. Titi era muy fuerte. También aprendí con Dennis Bergkamp a nivel técnico. Tenía la suerte de tenerlo en el equipo, y a Zizou en la selección. ¡Magia a tiempo completo!
Entre los oponentes, yo diría que Gary Neville me molestó mucho. No quería jugar. Sólo quería desestabilizarme, golpeándome o insultándome. A menudo caía en la trampa.
En 2006 el Arsenal llegó a la final de la Champions. Perdisteis contra el Barcelona (2-1) y encima te marchaste al comienzo del partido, sustituido por Almunia, tras la roja a Lehmann. ¿Es uno de los peores recuerdos de tu carrera?
Sí, es uno de los dos peores que tengo. Muy difícil de digerir. Que me cambiaran al principio no me importó tanto, es parte del juego y el entrenador tiene que tomar una decisión. Me dolió perder así una final en una competición tan dura como la Champions League
El otro es no haber sido campeón en Francia con el Metz. Me hubiera gustado añadir la Ligue 1 a mi palmarés
Terminaste tu carrera en 2016, en la India, y hoy en día eres analista en Canal Group y M6. ¿Cómo va esta nueva vida?
Empecé en beIN Sports, aunque hoy tengo la suerte de comentar la Premier con Canal Group y a la selección francesa con M6. Lo disfruto, y así sigo los partidos de los nuestros
¿Qué opinas de la situación actual del Arsenal, que es décimo en la Premier League?
El club sigue en transición, todavía es larga la sombra de Wenger allí. Es algo parecido a lo que le pasó al United con Sir Alex Ferguson, aunque hoy en día han mejorado bastante. Esto seguro de que el Arsenal dará la vuelta a la situación. Hay calidad para ello y confío en Arteta
¿Y de cómo se trató a Ozil antes de que se marchara al Fenerbahçe?
Visto desde fuera es incomprensible. Ozil y Arteta discutieron, pero Mesut no dijo nada y al final aceptó lo que le contó Mikel. Siguió yendo a entrenar cada día como uno más. Sabía que no iba a jugar, pero nunca se quejó. No se le puede achacar nada como profesional
Lo demás es decisión del entrenador. Como dicen en Inglaterra, el entrenador es el jefe. Una vez que haya tomado una decisión, debe ser aceptada.
¿Quién crees que ganará la Premier esta temporada?
Bueno, seguro que no será para el Arsenal este año (risas). Pero un club como el Manchester United estaría bien. Es un club ambicioso, con una gran historia.