Es increíble que el mexicano no valore a Hugo Sánchez como el crack mundial que fue con el Real Madrid

Ver a Cristiano Ronaldo perforando las metas de todos los equipos dentro de La Liga en sus 9 años como madridista fue todo un agasajo para los aficionados al fútbol; al igual que observar a Lionel Messi ganar sus 6 trofeos pichichis en la época más gloriosa del FC Barcelona. Ambos extraterrestres quebraron todos los récords y llevaron a otro nivel el concepto de ser un crack mundial, pero antes de ellos ¿hasta dónde llegaban los cracks?

Una de las mejores respuesta no necesita mayor vuelta: 5 pichichis, 290 goles en España y 5 ligas españolas avalan a Hugo Sánchez no sólo como el mejor mexicano de la historia, sino como uno de los mejores futbolistas en la historia del Real Madrid, el club más grande el mundo.

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En 1985, cuando 'El Macho' dejó el Atlético de Madrid para unirse al Real Madrid, la tabla de goleadores históricos de los merengues la lideraban Alfredo Di Stefano (308), Carlos Santillana (263), Ferenc Puskas (242), Paco Gento (182) y José Martínez Pirri (172); todos con un nombre tatuado en los pasillos del Bernabéu por la cantidad de temporadas disputadas en el club, pero una revolución se vivió en Chamartín con la llegada de Hugo.

Y es que en tan sólo 7 temporadas, 'Hugol' se echó al bolsillo a toda la afición madrileña, pues en tiempo récord se comió a Gento y Pirri en la lista de goleadores y se quedó a un par de temporadas de alcanzar a Santillana, quien después llegó a 290 goles en 17 temporadas dentro del club. 10 años más que Hugo.

Hugo Sánchez marcó 208 goles como merengue en 7 años vestido de blanco y ganó cuatro ligas consecutivas. Su llegada revolucionó a 'La Quinta del Buitre' y su actitud ganadora más sus espectaculares goles maravillaron a la grada del Bernabéu como ningún otro en ese equipo. Hugo fue la estrella de uno de los mejores equipos del mundo y se ganó a pulso su nombre en el museo del Real Madrid.

Después de leer lo anterior, resulta increíble que en México el único premio con su nombre sea para el goleador de la Liga Premier, una competencia de fuerzas básicas similar a una tercera división. Que en los medios forme parte de una mesa donde la polémica medio barata es el producto principal y que el aficionado azteca no lo recuerde como la gran figura que fue en la década de los 80.

Sin duda es recordado como un gran futbolista, el mejor en la historia de México, pero la naturalidad con la que se vive rodeado de su nombre hacen que sus hazañas pasen desapercibidas y no se le reconozca como se debe. Si Hugo Sánchez no fue el Cristiano Ronaldo de su época, se debe a que encima de él se encontraba un Diego Armando Maradona en plenitud y otro Michel Platini comandando Europa.

La nacionalidad le pegó a Hugo para no entrar en los mejores premios individuales del mundo y a su Real Madrid se le negó siempre la Copa de Europa, pero si alguna de estas dos cosas le hubiera jugado a su favor, estaríamos hablando de uno de los mejores futbolistas en la historia.

El mejor 9 del mundo sin ninguna duda en toda la década de 1980, pentapichichi y multicampeón en España. Hugo Sánchez rompió paradigmas como mexicano y puso en alto la bandera de su país. Le abrió la puerta a las nuevas generaciones y el futbolista azteca dejó de ser infravalorado en el escenario mundial.

En todas las palabras, Hugo fue un pionero y revolucionó el fútbol mexicano desde su trinchera en España, por lo que no se concibe que su nombre no esté en algún estadio de México, como premio al líder goleador del fútbol mexicano, a la mejor anotación del campeonato o como estatua receptora en el Salón de la Fama de Pachuca. Hugo es el futbolista más grande que ha dado este país y se merece todos los elogios posibles, porque igualar sus hazañas en aquella época es prácticamente imposible.

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