Faces of Football: Polonia - Carta para la selección nacional

Querida selección polaca,

Soy un psicoterapeuta e instructor de escalada que vive en Cracovia. He jugado y visto el fútbol desde que era niño.

Lo que más recuerdo de aquellos días era la expectación por el comienzo de los grandes partidos y la tensión cuando los jugadores salían del túnel.

De niño, siempre me empeñaba en predecir el resultado de cada partido, incluso los goleadores y todo lo demás.  Sin embargo, mis predicciones solían ser bastante erróneas, ya que, independientemente de contra quién jugasen, también elegía a Polonia como ganadora.

Esto dificultaba muchas de mis predicciones, ya que mi infancia coincide con un periodo bastante sombrío para la selección polaca. La década de 1990 no fue la mejor época para ser un aficionado a Polonia, ya que sufrimos una decepción tras otra. El recuerdo más claro que tengo de la selección fue durante la fase de clasificación para el Mundial de 1998, cuando Italia nos ganó por 3-0.

Sin embargo, un recuerdo feliz fue el gol de Marek Citko en Wembley que puso a Polonia 1-0 arriba contra Inglaterra... Perdimos el partido, pero aun así fue un momento bonito. Recuerdo perfectamente que veía los partidos con mis dos hermanos mayores y mi padre, y recuerdo que esos momentos juntos, animando a nuestra nación eran importantes.

Hubo muchos momentos memorables viendo juntos a Polonia, pero creo que el mejor fue cuando Polonia y Ucrania organizaron conjuntamente la Eurocopa 2012. Era algo con lo que soñaba de niño, aunque no tuviéramos una actuación especialmente buena en el torneo.

Creo que ahora tenemos un equipo realmente bueno que puede dejar huella en los grandes torneos. Piotr Zielinski es mi jugador favorito en este momento por su control del fútbol sin esfuerzo, y por fin parece preparado para liderar el centro del campo después de unos años de bajo rendimiento a nivel internacional.

Voy a ver este torneo con mis amigos y mi familia, y espero que podamos soportar el estrés juntos. Estoy seguro de que este año podemos superar nuestro grupo, pero cada pequeña victoria será recibida con enormes celebraciones que estoy seguro durarán hasta bien entrada la noche.

Mi único consejo al equipo es que crea en sí mismo y luche desde el primer minuto hasta el último.