Gargano salió a pedir disculpas por sus polémicas declaraciones contra los dirigentes
Por Sebastián Labart
Walter Gargano decidió salir a pedir disculpas por los dichos contra la dirigencia de Peñarol.
El volante había quedado en el “ojo de la tormenta” luego de declarar de manera contundente ante los directivos aurinegros, en la misma y en diálogo con Las Voces del Fútbol de AM 1130, dijo: "Hay gente que quiere jugar sucio. Si hablamos, vamos a sacarnos las caretas; esto es chiquito y todo se sabe. Me molesta que se quiera ensuciar a referentes, a gente que ya tenemos nuestra experiencia, que nadie nos regaló nada ni nadie le puso una pistola en la cabeza a nadie para que nos firmaran un contrato. Cada uno se gana lo que merece".
Lejos de quedar ahí, el referente carbonero continuó: “Hay gente que quiere favorecerse diciendo ‘estamos haciendo las cosas perfectas para el club’, porque dentro de poco hay elecciones otra vez y van a intentar ser electos o reelectos otra vez para presidente o vicepresidente o estar dentro de lo que es el club porque a ellos les sirve. Hay gente que está jugando las cartas sucias, está ensuciando a jugadores, porque esos jugadores no es que crean problemas, sino que quieren lo mejor para Peñarol y hay gente de la dirigencia que no quiere lo mejor para Peñarol, quiere lo mejor para cada uno”.
Estas frases no cayeron nada bien en el consejo directivo, y por eso se juntaron a debatir qué debería pasar con el jugador. Desde el club habían advertido que si el “Mota” no emitía sus disculpas públicas la situación se podía agravar aún más, y estas no tardaron en llegar. A través de un Instagram Live con su representante, Pablo Boselli, el jugador manifestó sus intenciones de pedir disculpas este viernes.
“Estamos en una negociación, el club adoptó una decisión y hay que respetarla pero tampoco es estar en silencio y ser atacado de una forma que no lo merecemos porque estamos haciendo lo mejor y como siempre digo, queremos lo mejor para el club. No quise ofender. No fue mi idea. Pero uno trata de hablar, llevar las ideas a una manera sin querer ofender ni atacar a nadie. Estamos en una condición muy difícil como todo el mundo, la peleamos y queremos tratar de llegar a un acuerdo. No queremos ser ventajeros, no queremos ser los malos de la película porque no lo somos, pero tampoco pasar como víctimas, porque víctimas no somos. Tratamos de ayudar y de que el club nos ayude en un momento difícil para los más chicos”.
“No va a ser un tema de dinero. Pasa a ser un tema psicológico donde muchas personas están sufriendo, han tenido problemas. Va a ser difícil, más que volver al fútbol. Mucha gente va a tener que recurrir o ir a especialistas para salir de los problemas y las secuelas que te deja un gran problema mundial”, explico.
Al referirse sobre la dirigencia, comentó: “ellos tratan de lograr lo mejor para el club o hacer un negocio donde el club no pierda y se mantenga una estabilidad. Los entendemos porque es la realidad, me pongo del lado del dirigente o del hincha que piensa que nosotros queremos robarle al club. No, nadie le quiere robar al club, ni poner en un problema económico más grande que tiene Peñarol de otras dirigencias que estuvieron antes, dirigentes, presidentes. Hay gente que trata de hacer lo mejor, y hay veces que las cosas no salen. Pero tampoco pasar la línea que es muy delgada para bien o para mal con las declaraciones que uno diga. Se hace difícil llegar a un acuerdo. Por el bien del plantel de Peñarol, lo que queremos es lo mejor para el plantel o para el club y si me quieren insultar, son sus ideas y las acepto. Hay veces que analizamos hasta que sabemos la verdad”.
“La idea es poder llegar y mirarnos a la cara y decir ‘se trató de hacer lo mejor para las dos partes’. Ser sinceros. Llegamos a un acuerdo, nos apretamos la mano y que sea lo mejor para todos. Que Peñarol salga favorecido y salga ganando, porque es lo que queremos. Que cuando regrese el fútbol, que Peñarol vuelva a la realidad de lo que es. Luchar de lo que todos queremos, que cuando regrese el fútbol, vuelva a la realidad de tratar de ganar el Uruguayo, seguir avanzando en la Libertadores que es un tema pendiente y la gente está muy ilusionada por todos los esfuerzos que hizo el club, por todas las cosas que se vienen preparando, pero en tres o cuatro meses va a volver todo a la normalidad si Dios quiere”, expreso sobre la negociación que desea con el CD.
“Hay veces que no trata de comunicar algo y no sale como uno piensa o quiere y la gente te trata de número y dice ‘este quiere lo peor’, ‘este es un desastre’ y capaz que las palabras no llegan de la forma que uno quiere. Yo no estoy liderando nada, no soy un líder. Hay un grupo que somos todos líderes. No soy el único. Sí fui el que hablé, pero en referencia a lo que piensa el plantel principal”, finalizo.
El mediocampista pudo pedir disculpas y hablar en un tono agradable bajo la supervisión de su representante, con el que ahora intentaran que las consecuencias para el “mota” sean las menos posibles. El jugador se ha visto afectado con la reducción salarial, ya que sustenta uno de los salarios más altos del club (50.000 dólares) y con él envió al seguro de paro y la compensación que ofrece la institución (por franjas) percibe solo el 12% de su salario mensual.