Guillermo Ochoa rompió su mala racha de penales en contra deteniéndole este a Lewandowski

El partido entre México y Polonia estuvo lleno de emociones y grandes momentos, pero uno de los más destacados fue la atajada de Guillermo Ochoa en penal contra uno de los mejores delanteros del mundo, Robert Lewandowski.

El guardameta mexicano nunca se ha distinguido por ser un atajador de penales. Tan así, que sumaba una racha negativa en este ámbito, pero como tiene acostumbrada a la afición mexicana, Ochoa cuando comienza un Mundial, su nivel sube exponencialmente.

La seguidilla del también arquero del América era de 31 penales consecutivos sin lograr detener uno. El escenario era perfecto pues el marcador era 0-0 ante los polacos y al aventarse a su lado izquierdo, consiguió que continuara así.

Gracias a esta atajada, la afición reconoció una vez más a Ochoa como un portero internacional, pues los medios del todo el mundo enaltecieron su actuación y detenerle una pena máxima a alguien como Lewandowski.

Además, esto mantuvo la esperanza de la selección mexicana para poder sacar tres puntos o al menos uno en el Grupo C, donde Arabia Saudita sorprendió a Argentina y hay posibilidades para todos.

Finalmente, en otro dato sobre este penal, según Míster Chip, es la primera vez en la historia de las Copas del Mundo que un capitán le detiene un penal a otro capitán. Y, por si fuera poco, es la primera vez desde 1930 que un portero mexicano ataja una pena máxima en Mundiales. En pocas palabras, Ochoa es histórico de México.