Gustavo Alfaro: "Siendo técnico de Boca defendí a Gallardo en la CONMEBOL por lo que le pasó en Gremio en 2018"

Con un final apasionante concluyó la Eliminatoria de Sudamerica, tal vez la más competitiva de todas. Ecuador llego a la última fecha con la clasificación asegurada, producto de la regularidad que mostró a lo largo de toda el proceso. Y buena parte de este éxito hay que atribuírselo a la presencia en el banco de Gustavo Alfaro.

En esta segunda parte de la entrevista, el entrenador de Ecuador explicó el por qué del pre concepto de ser tildado como un entrenador defensivo e indicó que le gustaría que se modifique. Además, contó por qué defendió a Tite ante la ruptura de su par con la Federación Brasileña y lo ejemplificó con una anécdota inédita en la que defendió al entrenador de River, Marcelo Gallardo, cuando él hacía lo propio en Boca.

Alfaro cuenta con una carrera de 30 años de experiencia en la que dirigió tanto a equipos de la Primera División del fútbol argentino como de la segunda categoría (anteriormente llamada Nacional B) y actualmente está al frente de Ecuador, su primer conjunto nacional. A lo largo de su extensa trayectoria siempre se lo ha asimilado con un estilo de juego más conservador y sin arriesgar demasiado. Aunque él lo desmienta...

¿Te molesta cuando sos tildado como un entrenador defensivo? ¿Cómo convivís con el prejuicio?

Desde que ascendí con Olimpo, un equipo que estaba yéndose al descenso y termina ascendiendo en un campeonato de 25 equipos, el Presidente me dijo que yo era el mejor en el Nacional B pero que no tenía nivel para dirigir en primera. Me tuve que ir después de ascender a Primera.

Hoy voy a jugar un Mundial y miro dónde está Olimpo de Bahía Blanca en esta instancia. A su vez, con Quilmes pudimos ascender y hacer la mejor campaña de un equipo recién ascendido clasificándolo a la Libertadores y Sudamericana. Así tengo muchos casos como el de Arsenal, Tigre, Gimnasia, Huracán, Boca. Yo siento que mi trabajo no fue valorado en su justa dimensión. Me valoran más cuando me voy que cuando estoy trabajando.

"Yo siento que mi trabajo en el fútbol argentino no fue valorado en su justa dimensión."

- Gustavo Alfaro.

¿Sentís que fuiste juzgado por tus palabras para con Tite cuando mencionaste que si se quedaba podía ser campeón del mundo?

Nosotros somos presos de nuestras declaraciones y conductas. A mí me generó controversia lo que le dije a Tite, pero yo estaba defendiendo a un par mío. Estaba defendiendo a una persona que estaba defendiendo a los jugadores, que no querían jugar la Copa América y eso le significó que no solamente desde la Federación Brasilera, sino también desde el gobierno, lo quieran derrocar. Yo le decía que no podía aflojar porque él había sido quien construyó esta realidad de Brasil y que eso lo podía llevar a ser campeón del mundo. Yo como entrenador me iba a sentir defraudado si él no daba esa lucha. Él contaba con el apoyo de los que sentimos el fútbol de esta manera. Y esto fue enfocado por una cuestión de nacionalidad. Hay que ser muy estúpido para pensar las cosas de esta manera. Como si yo estaba hablando a favor de Brasil y en contra de Argentina. Estaba defendiendo a un colega que para mí dignifica la profesión.

De la misma manera, siendo técnico de Boca lo defendí a Gallardo. Cuando estuve en CONMEBOL en el congreso que hicieron con los 32 entrenadores que disputaban la Copa Libertadores, yo pedí la palabra y lo defendí a Gallardo por lo que le habían hecho, que no lo dejaron entrar al banco de suplentes en semifinales en la edición anterior, que como estaba expulsado no lo dejaron entrar al vestuario a dar la charla técnica. ¿Tengo que hablar en contra de Gallardo porque yo era técnico de Boca y él de River? Si medimos las cosas desde ese lugar, hablamos de nuestras miserias, no de nuestras bondades. Yo voy a defender a todas las personas que siento que dignifican esta profesión. Siento que Gallardo dignifica esta profesión y cuando tuvimos que enfrentarnos, los dos jugamos a muerte por tratar de seguir adelante. De la misma manera lo hice con Tite y lo voy a hacer con el entrenador que sienta que tenga que defenderlo. Estas cosas no tienen idioma, no tienen bandera, no tienen nacionalidad. La forma de sentir el fútbol no tiene una nacionalidad que la identifique.