La DT de la selección de Bolivia, Zdenscka Bacarreza, recibió amenazas

Selección de Bolivia
Selección de Bolivia / EVARISTO SA/Getty Images
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Sin aviso oficial, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) publicó una convocatoria para ocupar el puesto que actualmente tiene la entrenadora de la selección de fútbol femenino de ese país Zdenscka Bacarreza quien había denunciado amenazas. ¿Cuál es la situación de la directora técnica y de la selección boliviana? Acá te lo contamos.

¿Qué pasó en la selección?


Bacarreza había gestionado dos partidos amistosos para que la selección de Bolivia enfrentara a República Dominicana el 18 y el 21 de septiembre por la fecha FIFA, con el objetivo de entrenar de cara a la Copa América 2022.. Para esos encuentros, la FBF solo debía pagar los pasajes de ida y vuelta del plantel, ya que los gastos en suelo dominicano correrían por parte de la federación local. Sin embargo, la FBF canceló el viaje a dos días de volar, aduciendo falta de presupuesto. Frente a esta situación, las jugadoras del equipo nacional le reclamaron a su federación. Tras denunciar discriminación a la Federación Boliviana de Fútbol por la suspensión repentina de dos amistosos previstos por FIFA, la DT de la selección Zdenscka Baccarreza recibió amenazas anónimas contra su familia, porque la federación la responsabilizó por la cancelación de los partidos.

¿Cuál es la situación del futbol femenino en Bolivia?

“No existe ningún tipo de preparación. No me permiten hacer micro ciclos, no hay una planificación ni tampoco apoyo. A las chicas y entrenadoras nos llaman dos semanas antes de las competencias simplemente. Por eso siempre salimos décimas de diez partidos, ¿cómo nos pueden exigir algo si no tenemos absolutamente nada?”, explicó la entrenadora a los medios.
El fútbol femenino en Bolivia aún no es profesional, ni está en miras de serlo, algo que sí ocurre en distintos países latinoamericanos. En varias entrevistas, Bacarreza señala que las jugadoras necesitan más apoyo, que se necesita un proyecto a largo plazo. Además, puntualiza en la demanda de tener selecciones permanentes y mayor roce internacional.
Las futbolistas bolivianas no perciben salarios por su trabajo como jugadoras de los clubes. Y la brecha salarial entre las direcciones técnicas masculinas y femeninas es evidente: mientras que Bacarreza cobra 3 mil dólares por jornada disputada -cifra que reparte con las ocho muejres de su cuerpo técnico-; César Farías, gana 80 mil dólares mensuales.