LaLiga 2024/24: los más beneficiados y perjudicados en el reparto de tarjetas en el comienzo de la temporada

El inicio de la temporada de La Liga 2024/25 ha puesto de manifiesto una notable disparidad en el reparto de tarjetas amarillas que han recibido los rivales de los principales equipos. A pesar de que solo se han disputado cuatro jornadas, las estadísticas reflejan un trato desigual que tiene al Real Madrid como el equipo más perjudicado.

Hasta el momento, el Real Madrid ha recibido 59 faltas en estos primeros partidos, sin embargo, sus rivales solo han visto dos tarjetas amarillas. Esto contrasta fuertemente con lo sucedido con el Barcelona, cuyo balance es de 53 faltas sufridas, pero con sus oponentes recibiendo 13 tarjetas amarillas. Este abismo en la cantidad de tarjetas mostradas ha generado inquietud tanto en el club como en su afición, que perciben una disparidad evidente en el trato arbitral.

En dos de los cuatro encuentros que ha disputado el Real Madrid, sus rivales, el Betis y el Mallorca, cometieron un elevado número de faltas sin que se les mostrara ninguna tarjeta. En particular, el Betis cometió 17 faltas y el Mallorca 11, pero ambos equipos terminaron el partido sin recibir ninguna amonestación. Comparado con el resto de equipos de La Liga, los rivales del Real Madrid han sido los menos castigados, con solo dos tarjetas en su contra, mientras que equipos como Valencia y Villarreal han visto a sus contrincantes recibir 12 amonestaciones.

Esta tendencia no solo es preocupante a nivel doméstico, sino que también posiciona al Real Madrid como uno de los equipos más desfavorecidos en el ámbito europeo. En comparación con las cinco grandes ligas europeas, solo tres equipos —Udinese, Unión Berlín y Bochum— han visto a sus rivales recibir menos tarjetas que los oponentes del Madrid, pero estos equipos han disputado menos encuentros.

Además, el Real Madrid lleva 43 partidos en La Liga sin que sus rivales vean una tarjeta roja, mientras que en el mismo periodo, el conjunto blanco ha sufrido cinco expulsiones, a pesar de haber cometido 204 faltas menos que sus rivales. Esta realidad ha generado descontento en el entorno madridista, alimentando la sensación de que existe un trato arbitral desigual en comparación con otros equipos, especialmente su principal rival, el Barcelona.

En solo cuatro jornadas, el Real Madrid ha visto cómo sus rivales pueden cometer más faltas sin ser castigados con tarjetas, lo que les permite jugar con mayor libertad y menos condicionantes. Esta situación, sumada a la larga racha sin que sus adversarios vean una expulsión, ha encendido las alarmas en el club y entre los aficionados, que esperan una mayor equidad en el futuro.