La maldición que persigue al dorsal 7 del Manchester United desde Cristiano Ronaldo

Desde que el portugués salió de Old Trafford  en 2009 han sido 5 los jugadores que han llevado ese dorsal pero ninguna de ellos ha conseguido estar a la altura y acabaron saliendo del club por la puerta de atrás.

El 7 es un número muy significativo y mítico en determinados clubes de fútbol. En el Manchester United grandes leyendas han lucido ese dorsal, desde George Best hasta Cristiano Ronaldo, pasando por Eric Cantona o David Beckham.

Pero desde que el jugador portugués dejó el United en 2009 ha quedado vacío, simbólicamente hablando. Ninguno de los jugadores que portó el 7 estuvo a la altura de lo que significa ese dorsal en la historia de los red devils dando comienzo así a una especie de maldición que a día de hoy aún perdura.

Tras la marcha de Cristiano fue Michael Owen quién heredó ese dorsal pero le quedó muy grande. El delantero inglés no pudo estar a la altura del portugués, algo que entra dentro de previsible, pero con el paso de las temporadas fue perdiendo protagonismo y su rendimiento no estuvo a la altura de las expectativas que generó su fichaje. En tres temporadas disputó 31 partidos en la Premier anotando sólo 5 goles.

Tras la salida de Owen en 2012, Antonio Valencia cambió el dorsal 25 por el 7, de hecho los propios aficionados del United lo pidieron expresamente debido a sus buenas actuaciones. Pero en cuanto se enfundó la camiseta con el nuevo número su rendimiento comenzó a bajar y a la temporada siguiente volvió a usar el 25. Parece que el peso del 7 era demasiado para él y en cuanto volvió a su antiguo dorsal recuperó su nivel.

Durante una temporada el dorsal permaneció sin dueño hasta que llegó Ángel Di María. El argentino aterrizó en Old Trafford en 2014 convirtiéndose en ese momento en el fichaje más caro de la historia del club. Di María prometía ser el nuevo líder de los diablos rojos pero al finalizar la temporada puso rumbo al PSG tras un año muy flojo en el que apenas anotó 4 goles. Ahora está consiguiendo brillar con luz propia en un equipo plagado de estrellas.

A continuación vino el turno de otro de los flamantes fichajes del conjunto inglés, Memphis Depay. El holandés lo lució durante una temporada y media ya que en el mercado de invierno de 2017 fue traspasado al Olympique de Lyon ya que en la Premier tan sólo había jugado 20 minutos.

El último jugador de la lista en sufrir la maldición fue Alexis Sánchez. El chileno llegó en enero de 2018 pero sus goles ya se habían perdido por el camino. Su rendimiento fue muy deficiente, se fue cedido una temporada al Inter de Milán y finalmente el United acabó regalando al jugador al club italiano en el último mercado.

Ahora será Edinson Cavani quién intenté romper una maldición que dura ya 11 años y volver a dignificar este dorsal. El listón para el uruguayo no está muy alto y en cuanto empiece a marcar goles conseguirá meterse a su nueva afición en el bolsillo.

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