La selección española perdona, se desinfla y comienza la Eurocopa con un triste empate frente a Suecia

Morata y Ekdal
Morata y Ekdal / Thanassis Stavrakis - Pool/Getty Images
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No nos alarmemos. España apenas ha ganado en uno de sus últimos 6 debuts en grandes torneos internacionales. Fue en la pasada Eurocopa, contra la República Checa, y sufriendo hasta el final (1-0). Todo gracias a un gol de Piqué. Hoy la tónica de la que avisábamos en la previa se ha repetido, y lo cierto es que es un resultado decepcionante.

Robin Olsen, Dani Olmo
Ocasión muy clara de Dani Olmo / David Ramos/Getty Images

Porque los nuestros jugaban como locales, y además empezaron con muy buen pie. La presión alta tan típica que siempre impone Luis Enrique hizo efecto, y la selección tenía mucho la pelota, en campo rival y eso le hacía generar ocasiones de gol. Las más claras, un cabezazo a bocajarro de Dani Olmo y un mano a mano que Morata envió fuera.

Pero hoy no era el día. El propio Morata fue quien mejor representó el espíritu de la Roja contra Suecia. Fue de más a menos, acabó muy apagado (sustituido en el minuto 65) y falló las ocasiones más claras de las que dispuso. Un espejo del combinado nacional, vaya.

La segunda parte fue muy plana, con un juego lento y en el que hubo menos ocasiones, a excepción de un arreón final llevado sobre todo por un Gerard Moreno que hizo más en 10 minutos que el delantero de la Juventus. Dominio claro pero muy plano y sobre todo estéril de la Roja.

Y eso que pudo ser peor. Suecia apenas gozó de 2 ocasiones, pero fueron clarísimas. A Isak le sacaron un gol en la línea entre Marcos Llorente y el palo en la primera mitad, y en la segunda parte Berg falló sin portero tras una gran jugada del delantero de la Real Sociedad. Cualquiera de los dos goles hubiera sido una losa que hubiera complicado muchísimo más las cosas.

Robin Quaison, Thiago Alcantara
Robin Quaison, Thiago Alcantara / Julio Munoz - Pool/Getty Images

Porque tras este pinchazo, ahora la clasificación no está tan clara. España decepcionó en su debut y se dejó dos puntos que pueden ser clave. Una actuación similar a la de hace unos días contra Portugal (0-0), con idéntico resultado. Ahora a pensar en Polonia, en lo que es una final. Ha sido un mal comienzo, pero todavía queda margen de maniobra. Confiemos.