Marchesín y Emi Martínez, muy por encima de Armani y Andrada

La lucha por el arco de la Selección Argentina, luego del ciclo cumplido de Sergio Romero como dueño total de los tres palos del combinado nacional, es ardua, pareja y con muchos apellidos para conformar un solo puesto.

Emiliano Martínez, Agustín Marchesín, Juan Musso, Walter Benítez, Esteban Andrada y Franco Armani son algunos de los guardametas que ya han demostrado estar a la altura de las circunstancias por condiciones y rendimientos en sus respectivos clubes, pero a la hora de tomar una decisión final hay que tener ciertos parámetros.

Para empezar, hay que decir que la decisión que tome el entrenador Lionel Scaloni en base a estos nombres será respetada, porque todos están en actividad y en mayor o menor medida se compite al alto nivel, sin embargo, a lo que quiero apuntar es a lo siguiente: ¿Realmente es lo mismo atajar en el torneo argentino + Copa Libertadores que en una competencia europea + Champions/Europa League?

La respuesta es que NO, por la simple razón de que en el Viejo Continente te patean los mejores jugadores del planeta, entre los cuales se encuentran muchos argentinos, y aquí en Sudamérica te patean muy buenos jugadores, sí, pero realmente son pocos los que actuando de este lado del mundo tienen la posibilidad de desempeñarse luego en sus seleccionados, que al fin y al cabo serán los rivales que enfrentará Argentina cuando le toque afrontar cualquier instancia.

Es por eso que, más allá de los notables desempeños de Armani y Andrada, sobre todo antes de la pandemia (luego ambos bajaron un poco su nivel), habría que darle prioridad a los que están compitiendo al máximo nivel y tienen un rendimiento idóneo, como Emiliano Martínez y Agustín Marchesín.

El primero salió del Arsenal en busca de minutos y en Aston Villa, de la misma Premier League inglesa, los consiguió con creces y destacándose en la competencia, siendo nombrado por los especialistas como uno de los mejores del certamen, mientras que Marchesín se encargó ayer de decir "Acá también estoy yo, eh", en plena Champions League para eliminar a la Juventus de Cristiano Ronaldo de los octavos de final, con un rendimiento espectacular.

A pesar de los tres goles recibidos en el encuentro de ayer, el ex Lanús tuvo un puñado de grandes intervenciones y fue uno de los motivos por los que el equipo portugués tuvo el partido siempre a tiro, sobre todo luego de quedarse con diez hombres por la expulsión de Taremi.

Si queremos competir al máximo nivel, tengamos primero en cuenta a los que están rompiéndola ahí. En definitiva, la fórmula es simple: cuanto más alta sea la vara, mejores rendimientos se pueden esperar a futuro, acostumbrándose inconscientemente a participaciones más importantes, que mejoran concentración-técnica-exigencia y dan resultados. El tiempo nos dará la razón.