Me verás volver y te arrodillaras: 10 años del día que River regresó a Primera División
Por Eitan Benzaquén
El 23 de junio del 2012 nunca será una fecha más para los hinchas de River. Fue el fin de una pesadilla, fue la esperanza por un futuro mejor, fue el desahogo por todo el sufrimiento vivido en una temporadA que pareció eterna.
El Millonario tocó fondo en 2011 y ocurrió lo que parecía imposible: el descenso a la Primera B Nacional. No había nada más bajo, pero esta historia tenía lugar para el dramatismo. Los de Núñez sufrieron hasta la última fecha para ascender y el 2-0 contra Almirante Brown en el Monumental se vivió con mucha emoción.
No se puede hablar de festejos, pero si de sacarse una mochila enorme de encima. Se dio el regreso al lugar en el que siempre debió estar y el comienzo del resurgimiento del gigante que se había caído.
En una de las platas del estadio se vio una bandera que reflejaría lo que iba a ocurrir después: "Me verás volver y te arrodillarás", decía el mensaje y sirvió para anticipar los años de gloria en el Millonario en los años posteriores.
Cuando uno toca fondo, cuando se conoce al infierno y cuando ya no parece haber esperanzas, es el momento en el que hay que salir a flote y empezar de cero. Eso hizo River y terminó viviendo los años más exitosos de toda su historia.
A diez años del ascenso a la Primera División, River duplicó la cantidad de títulos internacionales, recuperó la identidad, ganó dos Copas Libertadores y lo más importante fue que se volvió a ganar el respeto del fútbol mundial.
Más de un hincha hoy está convencido que no cambiaría nada de todo lo que pasó: era necesario vivirlo para poder regresar más fuertes y disfrutar el doble todo lo que se está consiguiendo. Aprender de los errores, no repetir el pasado y que nunca más pueda existir otro descenso.