Messi, mucho ruido y pocas nueces
Por Adrían Marcos
El futbolista argentino le ha cogido el gusto a esto de hablar en los medios de comunicación en este 2020, como ha quedado reflejado entre las entrevistas de Goal en septiembre y la de ayer en La Sexta. Sin embargo, Leo Messi sigue siendo un protagonista indiscutible por nombre, pero un entrevistado pésimo que se limita a seguir su discurso y decir lo que quiere sin salirse ni lo más mínimo de los márgenes.
El programa de Jordi Évole junto al '10' del FC Barcelona se había presentado como una de las charlas del año, un regalo de Navidad para todos los aficionados al fútbol en el que Messi, al fin, hablaría sobre todos los temas que le rodean a él y al club tras el año más convulso de su carrera. Y en cierto modo cumplió, el rosarino se pronunció sobre su posible salida, los problemas que tuvo con la directiva, las futuras elecciones y su futuro, pero sin dejar nada claro ni mucho menos.
El capitán azulgrana aprovechó de nuevo para azotar a Josep María Bartomeu al acusarle de las difamaciones a su persona cuando amenazó con salir, halagó el buen hacer de Koeman para reconducir el proyecto, y dejó claro que sigue manteniendo una estrecha relación con Luis Suárez y Neymar, lo esperado. Évole tan solo pudo sacarle el titular de su interés por jugar en la MLS, que prácticamente le cierra las puerta a un regreso a Newell's, su idea de futuro como directivo antes que técnico y el interés de su entorno en que visitase al psicólogo en algunos tramos de su carrera.
Y al final una entrevista que podría haber sido un auténtico bombazo, sin necesidad de desvelar su futuro o cargar contra nadie pero entrando en el juego del agudo periodista catalán, se quedó en una charla distendida, en el mismo escenario que la de hace unos meses y sin grandes novedades. Una conversación que probablemente normaliza la figura de Messi para el público, pero se queda muy corta desde el punto de vista periodístico.
Si bien Jordi Évole trató de tirarle de la lengua en más de una ocasión con sus repreguntas y reformulaciones, Messi parecía muy bien aconsejado sobre lo que decir y lo que no, pues no entró en ninguna polémica sobre la que no se hubiese pronunciado anteriormente. Seguro que más de un restaurante de la zona de Castelldefels agradeció la publicidad y La Sexta el dato de audiencia, pero el argentino demostró que su fuerte no son los cámaras, lo suyo sigue siendo el fútbol.