Neymar ya conoce su sanción por los incidentes con Álvaro González

Neymar ha sido sancionado con dos partidos
Neymar ha sido sancionado con dos partidos / Xavier Laine/Getty Images
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Neymar ya conoce su castigo tras los incidentes con Álvaro González: 2 partidos de sanción. El brasileño no jugó ante el Metz en el día de ayer, y no lo hará en las próximas dos semanas. Si reincide en ello, será castigado con tres fechas sin jugar. De esta manera se resuelve así la parte del crack del PSG en el conflicto, no así la del futbolista del Marsella que sigue siendo investigado por estos lamentables hechos ocurridos pasado domingo.

"Racismo no", le venía diciendo el '10' al central del Marsella. Tras una trifulca entre Benedetto y Paredes, llegó la jugada de la polémica en la que Neymar agrede a Álvaro por la espalda, propinándole un puñetazo en la nuca. Hecho que el VAR revisó y castigó con tarjeta roja. No fue la única, otras cuatro se mostraron en esa pelea. Ambos futbolistas siguieron su disputa por twitter. Álvaro publicaba un foto con sus compañeros de color, en twitter, y el brasileño le respondía: "No eres hombre para asumir tu error, perder es parte del deporte. Ahora insultando y trayendo racismo a nuestras vidas no, no estoy de acuerdo. ¡NO TE RESPETO! ¡NO TIENES CARÁCTER! Asume lo que dices".

Un esperpento que ha castigado a la liga francesa y al jugador del Marsella, quien recibe amenazas de muerte a diario. Él y su familia. Ante esto, el propio Neymar ha salido a pedir que no se repitan acciones como esta. La Liga francesa investiga al jugador, lo cual no quiere decir que vaya a resultar en castigo. Hasta el momento no hay una imagen en la que el español llame al ex del Barça "mono" como se ha asegurado. La única toma en la que se cree obtener tal recurso es la de BeinSports Catar, plataforma cuyo dueño es el mismo que el del PSG.

La Ligue 1 ha impuesto sanciones a Neymar (2 partidos), Kurzawa (6), Paredes (2), Benedetto (1) y Amavi (3). De esta manera se resuelve el esperpento vivido el pasado fin de semana en el Parque de los Príncipes. Una situación que no debería repetirse ni en Francia ni en ningún lugar del mundo.