No Neymar, no party

Neymar se perderá al menos el partido de ida ante el FC Barcelona
Neymar se perderá al menos el partido de ida ante el FC Barcelona / Catherine Steenkeste/Getty Images
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Decía Don Revie que cuando Eddie Gray, extremo al que entrenó en el Leeds United, jugaba sobre la nieve, no dejaba huellas, y algo parecido sucede cuando lo hace Neymar, sea sobre un manto blanco o verde. Dejando de lado los colores, el futbolista brasileño es uno de esos pocos por los que merece la pena comprar una entrada o aguantar pegado a la pantalla los 90 minutos que dura un partido y que cada vez se hacen más largos.

Y es que mientras en muchos lugares el fútbol cada vez se vuelve monótono y predecible, ‘Ney’ consigue con su sola presencia que esos dos calificativos queden a un lado. Quizá es por eso por lo que sus rivales le persiguen con el único objetivo de pararle y, sin duda alguna, esta última es la causa de que cada año sufra una o dos lesiones que privan al mundo de disfrutar de su magia y a él de un tiempo que nunca recuperara.

La ausencia de Neymar en el choque entre Paris Saint-Germain y FC Barcelona no solo afectará notablemente al rendimiento de su equipo, también al disfrute de todos los aficionados. Muchos azulgranas estarán contentos de que no se mida a ellos un futbolista como el brasileño porque saben lo que es tenerlo en frente, pero sobre todo lo que supone para un equipo en cuanto a desborde, regate, fluidez y, sobre todo, liderazgo. Neymar es el referente del cuadro francés en todo y sin él, junto a otras bajas importantes, el PSG tiene muchas menos posibilidades de pasar de ronda.

Y si bien habrá quien intente buscar causas remotas como el Carnaval o el cumpleaños de su hermana, probables hace unos años, a su ausencia, el extremo ha demostrado que en ese sentido a cambiado y que le duele cada partido que se pierde. "No sé cuánto tiempo podré aguantar, solo quiero ser feliz jugando al fútbol", dice en su último post de Instagram en el que busca una explicación tanto a los golpes como a las críticas que recibe.

El brasileño tiene ahora por delante un mes duro en el que tendrá que recuperarse de esa lesión muscular con la mirada puesta en el partido de vuelta de la Champions League que pasa por ser el más importante del año para su equipo. Y mientras tanto el mundo debe ver el fútbol actual y reflexionar acerca de todo el bien que hace Neymar porque si bien sin la fiesta y la samba carioca su juego no sería igual, sin Neymar, no hay fiesta.