El Barcelona de Koeman pierde el brillo de sus primeros días

Si había algo que había ilusionado al barcelonismo en el comienzo de temporada eso eran las grandes impresiones que había dejado el equipo con Koeman en el banquillo. Un nuevo esquema de juego, con un Ansu y un Coutinho estelares, con más contundencia en defensa y en ataque y que sobre todo ganó sus dos primeros choques con mucha solvencia, lo que empezaba a dejar atrás una temporada pasada tumultuosa.

Pero como pasa con la gaseosa, parece que todo eso se ha esfumado tras los primeros días. La ilusión del nuevo proyecto parecía un impulso, pero hace dos semanas contra el Sevilla ya se vio un equipo con más defectos y hoy el Getafe ha hecho que el Barcelona recuerde al de los días grises de los años pasados.

A excepción de un palo de Messi al comienzo y un rebote de Djené al final que también dio en el larguero, el conjunto de Koeman no ofreció casi ninguna solución en ataque. Por si fuera poco, Griezmann, la nota discordante en el buen Barcelona del mes pasado, sigue padeciendo un calvario. No juega en su posición y es evidente, por mucho que el técnico quiera zanjar el debate. Eso lastra tremendamente su rendimiento, y si encima hoy vuelva a fallar una ocasión clarísima...

Los de Bordalás anularon a la perfección a las estrellas de su rival y encontraron su premio tras un penalti tonto de De Jong a Djené. El holandés es otro que está lejos de su mejor versión, y ya lleva casi año y medio así. Sin que nadie estuviera especialmente mal a excepción del mencionado Griezmann, todo el equipo hoy mostró una versión muy gris y se llevan una derrota merecida. Ganar les hubiera llenado de inyección para el Clásico, más tras la derrota del Real Madrid ante el Cádiz (0-1), pero los azulgrana han desaprovechado una oportunidad muy buena

El único que no estuvo gris fue Pedri. El canario está dejando patente que es un jugador con mucha clase y hoy incluso fue titular. Lo aprovechó a la perfección, con muchos detalles de calidad y visión de juego en el ataque azulgrana. De todos los fichajes que ha hecho el equipo este año, es de largo el que ha comenzado mejor la temporada.

Hoy el Barcelona volvió a mostrar vicios del pasado, que parece que no se van de un día para otro aunque llegue un entrenador nuevo. El Clásico del sábado es una oportunidad de oro para redimirse. Si no, las buenas sensaciones de septiembre se acabarán de evaporar. El Barcelona está perdiendo el brillo de los primeros días.