Portugal vs Ghana: lo bueno y lo malo del debut de Cristiano Ronaldo en el Mundial de Qatar 2022
Por Jose Benitez
La victoria de la Portugal de Cristiano Ronaldo, que se sobrepuso al combinado nacional de Ghana que en un partido histórico para el ex atacante del Manchester United, que hizo historia en Qatar. La convulsa segunda parte del encuentro vio nada más y nada menos que 5 goles (que pudieron ser más): 3 de los lusos y 2 de los africanos, que vendieron cara la victoria.
Lo bueno del Portugal vs Ghana
El récord de Cristiano Ronaldo
El de Madeira se convierte en el primer jugador en toda la historia en anotar al menos un gol en cinco ediciones de la Copa del Mundo (Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014, Rusia 2018 y Qatar 2022).
El partido de Mohammed Kudus
El del Ájax de Ámsterdam tiró del carro del conjunto africano y fue sin duda alguna la mayor apuesta de Ghana en la segunda parte asistiendo el gol del 1-1. Tras su sustitución todo le salió mal a los suyos.
El ambiente entre la afición ghanesa
En un Mundial marcado por la menor presencia de aficionados y "peor" ambiente del habitual en una Copa del Mundo, el publico de Ghana puso la nota feliz en el Estadio 974 apoyando a su combinado nacional que sueña con clasificarse a octavos de final.
Lo malo del Portugal vs Ghana
La no-actuación del VAR
Tras un polémico gol anulado a Cristiano Ronaldo por una teórica falta cometida previamente por el atacante luso, el árbitro no vio (y el VAR no revisó) una fortísima patada del ghanés Alidu Seidu al portugués João Félix que, de ser revisado convenientemente, hubiese derivado casi con total seguridad en un claro penalti a favor de Portugal.
Posteriormente, en la segunda parte, el árbitro pitó como válido un polémico penalti favorable a los lusos que tampoco llegó a ser revisado.
El desmorone ghanés tras conseguir empatar el partido
Coincidiendo con la marcha al banquillo de Kudus tras asistir el gol con el que el combinado de Ghana empataba a 1 el partido, los africanos vieron cómo sus opciones de desvanecían y empezaban a "lloverles" los goles cuando mejor estaban jugando. El técnico Otto Addo quizás fue demasiado conservador sustituyendo al hombre del partido (que previamente había recibido una tarjeta amarilla). Tras el desastre consiguieron reponerse y cerca estuvieron de volver a empatar el partido.