Promesas brasileñas que se estrellaron en la Premier League y no lograron brillar
La Premier League no es una competición sencilla, ni tan siquiera cuando no estaba en sus mejores momentos. El fútbol inglés exige una muy buena condición física y capacidad de trabajo duro. Los árbitros son muy permisivos con el contacto y su fútbol no es apto para todos. No siempre es el mejor camino para llegar a Europa. Tampoco para los brasileños, tan aventurados a buscarse las castañas en otro fútbol. Algunos llegaron con la vitola de grandes promesas y terminaron saliendo por la puerta de atrás.
Estos son algunos de los cariocas que se estrellaron en la Premier:
1. Kléberson
Kléberson no encajó en el Manchester United. Los red devils pagaron en torno a 7 millones de euros por el futbolista del Atlético Paranaense y él se lesionó en el segundo partido con la elástica red devil. Llegó a jugar 30 partidos de la mano de Alex Ferguson y solo marcó dos goles. Es habitual encontrarlo en listas de los peores fichajes de la historia del conjunto de Old Trafford.
2. Jo
El Manchester City empezaba a construir un equipo cargado de estrellas. Los citizen pusieron sus ojos en Jo, por aquel entonces delantero estrella del CSKA de Moscú. Pagaron más de 20 millones de euros para que el punta llegara al Etihad Stadium. No se adaptó al fútbol inglés y fracasó en Manchester.
3. Denilson
El Arsenal pagó 5 millones de euros al Sao Paulo para fichar a Denilson en 2006. El centrocampista tuvo momentos de brillantez, pero su carrera con los gunners estuvo plagada por irregularidades, momentos sin fútbol y lesiones. Terminó regresando al Sao Paulo como jugador libre.
4. Sandro
Sandro llegó al Tottenham con la vitola de crack que iba a despertar la grandeza de los spurs. Nada más lejos de la realidad. El brasileño durmió a los del norte de Londres y terminó por salir al Queens Park Rangers. Ha formado parte de varios equipos ingleses, pero en ninguno ha conseguido destacar.
5. Anderson
Anderson llegó al Mancheste United tras una temporada muy buena con el Oporto. Alex Ferguson confiaba en él y estaba dispuesto a sacar su mejor nivel. Lo exprimió, pero no consiguió hacer zumo. El brasileño iba de mal y en peor. Al final, sin solución, salió cedido a la Serie A.