¿Qué tiene que mejorar Luis Enrique en la selección española de cara al partido contra Japón?
Por Jose Benitez
La selección de España está siendo sin duda uno de los equipos que mejor practican el fútbol en la Copa del Mundo. Tienen una idea de juego clara y la ejecutan muy bien, eso si, no están exentos de cometer errores que como vimos ayer frente a Alemania, te pueden costar la victoria.
La Roja tiene un plantel muy talentoso, pero no cuenta con los mejores jugadores del mundo, por lo que para ganar tienen que hacer partidos prácticamente perfectos, y aunque el próximo rival es Japón, una selección inferior, deberán tratar de hacerlo todo bien para que los conceptos queden interiorizados y en las próximas rondas no se vean los fallos vistos contra los germanos.
Salida de presión sin pérdidas
España es un equipo que quiere jugar siempre con el balón en el suelo, y desde el saque de portería tratan de construir el ataque de manera organizada. Contra equipos que se encierran atrás es una propuesta muy efectiva ya que les permite llegar en bloque al campo rival, pero contra rivales que presionan se pueden ver pérdidas muy peligrosas que puede costar muy caro.
Ayer vimos algunos ejemplos que pudieron condenar a España, por lo que los jugadores deben arriesgar siempre con conocimiento y ofrecerse más para que no haya pérdidas de balón.
Los cambios de Luis Enrique
Con el marcador a favor y con el tiempo casi agotado, España pudo haber ganado consistencia si Luis Enrique hubiera hecho unos cambios más adaptados. Sin embargo, colocó a Balde en izquierda y no sustituyó a Busquets, cuando estaba visiblemente cansado.
En una competición tan igualada como el Mundial, Luis Enrique a veces deberá amarrar los partidos con cambios defensivos pese a que eso implique renunciar a su filosofía de juego ofensivo.
Contundencia y velocidad en defensa
España sufrió atrás en los contraataques ya que los defensas españoles no son muy rápidos. Luis Enrique debe encontrar una forma de compensar esa falta de velocidad y quizás sea ganando contundencia. España apenas realizó faltas y tampoco fueron capaces de ganar duelos en momentos clave, lo que permitió a Alemania generar peligro.