¿Quién es Achraf Hakimi? La historia del lateral de Marruecos que es una de las figuras del Mundial de Qatar 2022
Había un último penal que definía si Marruecos seguía haciendo historia en Qatar y se clasificaba a cuartos de final para jugar contra Portugal. El que se paró a doce pasos del arquero Unai Simon fue
Achraf Hakimi. No dudó. Picó la pelota al medio. Unai se tiró para uno de los palos. Marruecos consiguió con ese gol, escribir una nueva página. Hakimi salió corriendo hacia las tribunas y buscó a su madre para festejar con ella. El domingo, después de otro batacazo que dejó afuera a Portugal del camino a la Copa, Hakimi también la buscó y bailó con ella dentro del campo de juego. Acá te contamos la historia del lateral del PSG.
Saida y Hassan, madre y padre de Hakimi llegaron a España desde Rabat en 1988, cuando tenía ambos veinte años. Él era vendedor ambulante y ella, trabajaba limpiando casas. Cuando nació Achraf, en 1998 vivían en Getafe. Después nacieron Nabil y Widad.
El hoy jugador del PSG empezó su carrera en el Club Deportivo Colonia de Ofigevi, en el barrio El Bercial. Un año después, llegó a las inferiores del Real Madrid. B. A sus 20 años, el club merengue lo cedió al Dortmund, pero en 2020 cuando tenía que volver al Madrid, el club lo vendió por 43 millones al Inter de Milán. Era el primer verano de la pandemia. Un año después, Hakimi fichó por el PSG, donde juega por la banda derecha.
Fue elegido como el mejor jugador joven africano de 2018 y 2019, y considerado Balón de Oro africano de menores de 21 años.
Desde que jugaba en las inferiores del Real Madrid, la federación española lo buscó para que representara a la selección. “Durante mucho tiempo yo atendía las llamadas de la Federación. Hubo contactos y llegó a entrenar algunos días en Las Rozas, pero él quería jugar con Marruecos”, contó el padre a la prensa. “No me sentía como en casa. No era por nada en concreto, sino por lo que yo sentía, porque no era lo que había vivido en casa, que es la cultura árabe, ser marroquí. Yo quería estar aquí [con Marruecos]”, dijo el jugador en una entrevista en el diario Marca. Aunque nació en Madrid, Hakimi renegó de la selección española para encabezar la mejor generación - hasta ahora. de futbolistas marroquíes.
En la vida del futbolista se interesacta la historia marroquí, la española, la inmigración y el racismo. “Aun teniendo mi DNI y mi pasaporte, da igual. Ven un nombre árabe, ven tu cara marroquí y hacen cosas racistas. Puedo ir en un auto caro y cuando te detiene la policía te trata pensando que somos ladrones de autos… Simplemente por nuestra apariencia”, dijo.
Ese jugador hoy festeja en Qatar dentro de la cancha junto a su madre, que baila cubierta con su hiyab. Ella sonríe, le aprieta los cachetes, lo toma de las manos, salta con él. La hinchada alienta, siempre cantando. La imagen recorre el mundo.
"Nos vemos pronto, amigo ❤️🤝🏽@KMbappe", escribió en su cuenta de Twitter el lateral marroquí luego de que la victoria de Francia sobre Inglaterra confirmara el cruce. Los compañeros y amigos del Paris Saint-Germain se verán las caras el próximo miércoles por el pase a la final. Hakimi quiere seguir haciendo historia con su país.