¿Cuál es el peor fichaje de la historia del Barcelona: Dembélé, Coutinho o Griezmann?
La directiva de Bartomeu acarreó multitud de problemas al Barcelona, y algunos de ellos siguen dando coletazos a día de hoy provocando que un club en pleno proceso de restructuración tenga que encargarse de solucionar papeletas que no deberían corresponderle a estas alturas.
Uno de los aspectos más criticados durante su directiva fue el despilfarro de dinero en traer estrellas mundiales sin siquiera plantear si encajarían o si eran necesarios. Por eso hoy en 90min, cuando hemos querido analizar cuál ha sido el peor fichaje de la historia del Barça, nos hemos dado cuenta de que los tres candidatos que hemos elegido para comparar fueron fichados durante la presidencia de Josep María Bartomeu.
Este análisis comparará a Ousmane Dembélé, Philippe Coutinho y Antoine Griezmann. Dentro de cada uno de ellos aportaremos argumentos a favor y en contra para colocarlos como peor fichaje de la historia del club, o al menos de la reciente.
Philippe Coutinho
A favor (¡de ser el peor fichaje!)
Fue el que más dinero costó de los tres mencionados anteriormente. Además era sobre el cual más expectativas se tenían depositadas. El jugador llegó a Barcelona para intentar hacer olvidar la marcha de Andrés Iniesta, y solo consiguió que cada día se echase más de menos al manchego. Sus mejores cifras desde que llegó a Barcelona se produjeron en el primer medio año. A partir de ahí comenzó una carrera cuesta abajo que ha terminado en la cesión de hoy día al Aston Villa.
En contra
Sus 25 goles en 106 partidos le dejan cerca de anotar un tanto cada cuatro choques, cifras que realmente no está nada mal para un centrocampista que en muchas ocasiones entraba desde el banquillo.
Antoine Griezmann
A favor (¡de ser el peor fichaje!)
A diferencia de los otros dos futbolistas desde un primer momento gran parte de la afición se posicionó en contra de su contratación. Era un futbolista excesivamente caro y además compartía virtudes y zona del terreno de juego con Leo Messi. Era totalmente innecesario, y el tiempo acabo dando la razón a esos faltos de fe.
Se terminó yendo ¡cedido! al Atlético de Madrid, club al que el Barcelona había pagado más de 100 millones de euros por su fichaje dos años antes.
En contra
Tras sus dos temporadas en Barcelona llegó a disputar 99 partidos. En ese casi centenar de encuentros con el club culé participó en 50 goles (34 goles y 16 asistencias). Es decir, el futbolista francés produjo un gol cada dos encuentros.
Ousmane Dembélé
A favor (¡de ser el peor fichaje!)
El jugador llegó por una cantidad exagerada de dinero en esa época en la que el Barça contaba con muchos fondos consecuencia de la venta de Neymar. La gran mayoría de sus cuatro años en Barcelona los ha pasado lesionado, llegando una temporada a disputar únicamente nueve partidos. Está camino de completar su quinta campaña, y en ninguna de ellas ha podido superar la cifra de 14 goles.
Un futbolista que venía para ser estrella mundial no puede considerarse siquiera un fichaje decente sí, pese a ocupar la posición de delantero, no ha conseguido en cuatro temporadas y media anotar más de 31 goles. Aproximadamente seis goles cada campaña.
A todo esto hay que sumarle el problema de su renovación. El futbolista galo está exigiendo una cantidad exagerada de dinero al Barça para renovar, después de que el club culé haya estado pagándole una millonada durante estos cuatro años, sin recibir prácticamente nada a cambio, pues recordemos que Dembélé no ha sido en ningún momento decisivo para el Barcelona.
En contra
Si algo hay que reconocerle a Ousmane Dembélé es que cuando físicamente las lesiones le han dejado participar de forma asidua en los partidos, ha demostrado que es un jugador como la copa de un pino. Seguramente si las lesiones le hubiesen respetado desde un primer momento ahora mismo sería considerado uno de los mejores futbolistas del mundo.
Después de este análisis llegamos a la conclusión de que el peor fichaje de la historia del Barcelona es el de Ousmane Dembélé si tenemos en cuenta la cantidad de dinero que se pagó, su aporte hasta el día de hoy y su actitud respecto a la renovación.