River respetó a Laferrere de la mejor manera posible: le propinó un 5-0 sin bajar la intensidad
River Plate dio un gran primer paso en la Copa Argentina 2022: por los 32avos de final del certamen, goleó 5-0 aDeportivo Laferrere, equipo de la Primera C, con goles de Bruno Zuculini, Julián Álvarez, Juanfer Quintero, Andrés Herrera y José Paradela.
Si bien no ofreció su mejor versión, lo que quiero destacar del equipo de Marcelo Gallardo es que jamás bajó la intensidad para afrontar el enfrentamiento con su rival, ni en los primeros minutos donde ejerció la presión alta que tiene como costumbre ni en el cierre, intentando convertirle la mayor cantidad de goles posible.
Hay una frase en el fútbol que no por vieja deja de ser muy cierta: "No hay mejor manera de respetar al rival que meterle el máximo número de goles que puedas". Eso hizo River con Laferrere, a diferencia de muchos conjuntos que enfrentan a rivales inferiores, sobre todo en esta Copa Argentina.
Quieran o no, intencionalmente o sin darse cuenta, bajan la guardia después de un rato, cuando saben que el partido será favorable bajan de quinta a primera, de vez en cuando ponen segunda, pero no hacen más que esperar a que termine el choque.
En cambio en River, por la exigencia del DT con sus futbolistas y por la pelea sana pero competitiva de los futbolistas para ganarse un lugar en el XI titular de cara a los futuros compromisos, cada partido es una final, cada juego aéreo la vida, cada oportunidad la chance de mostrar para qué estás.
Eso lo entienden a la perfección los jugadores de River, y además nunca bajan el nivel para no faltarle el respeto a su rival, en este caso Laferrere: saben que muchos de ellos en algún momento se encontraban en clubes de esa categoría, o que el fútbol da tantas vueltas que nunca se sabe. Son rivales pero no dejan de ser colegas.
River se medirá en la siguiente instancia ante el vencedor del cruce de Barracas Central, equipo de la Liga Profesional, y Acassuso, club que se encuentra en la B Metropolitana. Sea cual sea el rival, observaremos a un equipo apabullante, exigente con sí mismo y que irá al frente buscando convertir la mayor cantidad de goles posible. Y eso está muy bien.