Samuel Umtiti ya no está en condiciones para liderar la defensa del Barcelona

Ronald Koeman está tratando de darle un cambio de imagen a este Barcelona, y por momentos lo ha conseguido, pero el equipo arrastra muchos vicios de pasadas temporadas. Los fallos en defensa han lastrado al Barça en los últimos años, errores infantiles que han condenado al equipo en más de un partido y que ayer volvieron a salir. Ante los grandes equipos, aquellos que muestran solidez sobre el terreno, el Barça se hace pequeño en defensa y se acaban condenando.

La falta de contundencia atrás puede dejar a los azulgranas sin la final de Copa, y si hay una lección que deben sacar Koeman y el club de ese partido es que Samuel Umtiti ya no está para liderar la defensa. Las bajas obligaron a que fuese el francés quien marcase la pauta atrás, pero este ya no es Big Sam. Desde la lesión no ha vuelto a ser el mismo, le falta velocidad, y que un equipo como el Barcelona, con su estilo de juego, y sin sus centrales titulares sobre el terreno, le otorgue el liderazgo defensivo a Umtiti ante el Sevilla es un suicido, por mucho que pese. La culpa de la derrota no debe recaer únicamente sobre el francés, pero el roto que le hizo su compatriota Koundé sí es su responsabilidad, y de Koeman por ponerle.

En estos momentos Umtiti no estará para grandes lances, quizá para partidos de baja intensidad. El defensa galo todavía podría jugar en el Barcelona si está atrás bien arropadito, pero este equipo no se caracteriza precisamente por encerrarse atrás, por lo que es probable que esté dando sus últimos coletazos con el conjunto azulgrana. Tener un central como Umtiti, al que ya no puedes confiarle la defensa, que ha perdido su chispa explosiva y velocidad no es un buen negocio para este equipo.

El Barça lleva mucho tiempo intentando solucionar sus problemas en defensa sin éxito y tiene que tomar una decisión radical. Viendo que Umtiti sólo está para ocasiones contadas, el Barça tiene que apostar por un central o dos, que rindan en cualquier ocasión y que puedan ser tanto acompañante como sustituto de Piqué en un futuro cada vez más cercano. Lo que iba a ser Umtiti antes de la lesión, pero el destino le ha cambiado los planes. La defensa del Barça lleva años pidiendo ayuda, quizá la lección el Sevilla les haga despertar.

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