Se cumplen 17 años del debut de Messi en la Selección Argentina: expulsión inmediata y defensa de Scaloni

Lo que se suponía que iba a ser un debut soñado para el chico prodigio del FC Barcelona con la camiseta de la selección argentina mayor terminó siendo la peor pesadilla: un 17 de agosto, pero de 2005, Lionel Messi ingresó desde el banco en la segunda parte, reemplazando a Lisandro López en el minuto 64 e instantes después se fue expulsado.
A los 18 minutos del segundo tiempo, el DT José Pekerman le dio ingreso al nene rosarino, pero apenas duró 40 segundos en cancha: en la primera que tocó, quiso encarar como él sabía y el lateral Vilmos Vanczák lo tomó de la camiseta. De 18 años en aquel momento, Messi intentó sacárselo de encima con un manotazo que apenas rozó del húngaro, quien exageró demasiado y provocó la decisión del árbitro Markus Merk de mostrar la tarjeta roja.
Cuarenta (!!!) fueron los segundos que duró en la cancha. No había cumplido un minuto en cancha y el árbitro lo expulsó.
— JS⚽️ (@juegosimple__) August 17, 2022
A 17 años del fallido debut de Messi en la Selección. 🇦🇷 pic.twitter.com/Qt4uBakhoj
Lionel Scaloni, actual entrenador de la Albiceleste y el gran responsable de haber enderezado el rumbo de este plantel que ganó la Copa América 2021 y la Finalissima, y que buscará coronarse en Qatar 2022, jugó ese encuentro y fue quien encabezó el reclamo para intentar que el árbitro entre en razón y le quitara la tarjeta roja a Messi. Ya lo defendía desde aquel momento.
Se cumplen 17 años del debut de Lionel Messi en la Selección Argentina mayor en un amistoso vs. Hungría.
— Germán Carrara (@GermanCarrara) August 17, 2022
Solo fuero 48 segundos porque el árbitro alemán Markus Merk vio una supuesta agresión de la Pulga. ¿Quién fue el primero en cuestionar la sanción? ¡Lionel Scaloni! pic.twitter.com/jEELlGVCR9
"Pensaba 'entré y me echaron, no me van a llamar nunca más'. Fue terrible", expresó Messi sobre ese episodio, años luego. Afortunadamente para todos, eso no ocurrió y hoy la Pulga es el jugador con más partidos en la Selección Argentina, el que más goles convirtió y probablemente uno de los tres jugadores más simbólicos en la historia del combinado nacional.