Tévez no perdonó y metió un gol digno de un buen 9
Por Joaquín Jary
Desde que Darío Benedetto dejó Boca Juniors, no encuentran un N°9 que se calce la azul y oro y se dedique a marcar goles. Ábila fue quién mejor lo hizo, pero las lesiones le marcaron la salida. Mientras Soldano, Hurtado, entre otros, demostraron no estar a la altura. Hoy, ante River Plate, Carlos Tévez actuó en contraposición a sus declaraciones y convirtió en el hábitat de todo goleador: en el área.
El Apache, siempre que era consultado por su puesto preferido dentro del verde césped, solía afirmar -cuando Gustavo Alfaro lo ponía de referencia- que era "detrás del centrodelantero". Porque allí tiene la posibilidad de encarar, asistir y manejarse con ciertas libertades. El momento que atraviesa, con 37 años, hacen que no importe dónde esté ubicado: rinde porque es crack y está cargado de confianza.
Esta tarde, frente al Millonario, no perdonó y desestimó las dudas, tras el yerro ante Santos por Libertadores y la importancia del NO de Edison Cavani, convirtiendo un gol a pura picardía: centro de Medina y, a pura picardía, se hizo un lugar en el área, con un leve empujón a Maidana, para sellar de cabaza el 1-0.
El DT Russo lo necesita en esa zona del campo de juego y Carlitos, en un momento de su carrera en que sólo se dedica a jugar, paga con un buen rendimiento en el duelo que más disfruta de jugar: el Superclásico. "Ustedes pueden alegrarle el domingo a la mitad del país", dijo Riquelme entre semana cuando asistió al entrenamiento. Vaya que el ex Juventus lo entendió: anotación del 10 para meter -hasta ahora- al Xeneize en la semifinal del torneo local.