Todo lo que tienes que saber sobre la historia de Toño García

José Antonio García se encuentra actualmente en silla de ruedas.
José Antonio García se encuentra actualmente en silla de ruedas. / Hector Vivas/Getty Images
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José Antonio García se formó en la cantera de los Pumas y hace tres años era titular, pero desgraciadamente en la actualidad se encuentra en silla de ruedas por una negligencia médica y por ello está exigiendo justicia.

Toño llegó a los diez años a la cantera universitaria pasando por las categorías Sub-13, Sub-15 y Sub-17 hasta que en el 2012 debutó como profesional en la Liga MX y ese mismo año marcó su primera anotación frente a los Diablos Rojos del Toluca.

Cuando pasaba por su mejor momento sufrió una lesión en la ingle, la cual fue mal atendida por parte del cuerpo médico auriazul, quedando alejado de las canchas, ya que entre 2013 y 2014 acumuló cuatro operaciones de cadera, todo bajo la directiva de Antonio Sancho, y aunque su desempeño bajó debido a las intervenciones, continuó jugando pese al dolor.

Con el arribo de Rodrigo Ares de Parga a la directiva, García renovó por dos años y se fue a préstamo con el Zacatepec al Ascenso MX sin ser consultado. Ya en el 2017, el entonces defensa acudió con un especialista que le dijo que todo el procedimiento lo había llevado mal y que únicamente le quedaba una opción: seguir caminando o jugar.

“Un doctor me dio la estocada final y así empieza ‘Tú olvídate del fútbol, tú lo que necesitas es una prótesis de cadera en las dos piernas y ya no hay nada más que hacer’. Fue como ‘wow’, el shock. Ha sido el día más duro, ese día sí estaba inconsolable porque fue como darme la estocada final cuando yo tenía otras expectativas”, declaró el canterano auriazul.

“Yo tengo cuatro cirugías en la cadera, todas con contrato vigente en el club. Fue claramente negligencia médica porque no se cumplieron con los tiempos de rehabilitación. Le pedí al club que me dejaran ir con el doctor Prestana (América y selección mexicana). No me dejaron y terminé realizando esa cirugía con pasantes. El club sabía perfectamente de mi situación, me renovaron por dos años. Al año y medio no podía con los dolores, eran insoportables. En junio del 2018 termina mi contrato, el club me dice que no entró en planes. Viajo a Los Ángeles y me dicen que ya no puedo jugar más, necesitaba prótesis. Posteriormente entró al tratamiento en el cual uso silla de ruedas, esto no es permanente”, añadió.

Actualmente, el también lateral tiene 28 años y está en silla de ruedas, así que compartió al Diario Récord que Universidad Nacional se ha desentendido totalmente de él, a pesar de que tenía contrato vigente y la lesión se produjo en un partido oficial, por lo que el futbolista tuvo que hacerse cargo de sus gastos de rehabilitación.

Luego de tres años de haber disputado su último compromiso con Pumas, Toño acudió al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para que los felinos se hicieran responsables por la negligencia y de acuerdo al periodista del Diario Récord, Ignacio “Fantasma” Suárez, antes de que recurriera al TAS, los auriazules solamente le habían ofrecido 70 mil pesos para cubrir los gastos médicos como indemnización para evitar que el futbolista acudiera a instancias superiores.

Posteriormente a la nota publicada por el rotativo, Universidad Nacional emitió un comunicado de prensa en el que se dejó claro que no hablarían del tema: “Con relación a la demanda ante el TAS por parte del señor José Antonio García Fernández, el club manifiesta que, en apego a la confidencialidad del procedimiento y respeto a las partes, no emitirá una declaración al respecto hasta en tanto no se desahogue el mismo”.

Sobre el tema, García dijo: “En ningún momento el club quiso arreglar, me ofrecieron 70 mil pesos, yo llevo casi gastado un millón de pesos. El club mantuvo su postura y me duelen estos tratos. Es el club que representa a la máxima casa de estudios. Hay gente que daña mucho a la institución. Cuatro, cinco personajes son los que dañan a uno de los equipos más importantes del país.

Entre los involucrados en el asunto está José Remírez, quien en la anterior directiva era el vicepresidente de operaciones, y hasta ahora es integrante de la diligencia auriazul, además de los últimos integrantes que quedan y formaron parte de la administración de Ares de Parga.

A pesar de que muy probablemente no volverá a jugar al fútbol, Toño se deja ver en sus historias de Instagram con buen humor y tratando de llevar una vida normal mientras se recupera, aparte estudia la licenciatura de Comunicación y junto a su pareja, Cris Aguinaga, hija de la leyenda ecuatoriana del Necaxa, Alexis Aguinaga, se muestra sonriente, leyendo, nadando o haciendo otras actividades.

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