Un Barcelona triste no puede si quiera plantarle cara a un Atlético de Madrid muy superior

Venía de una semana ya complicada, y parece que en este parón de selecciones el poso en el Barcelona va a ser de incomodidad. Hoy ha caído de nuevo en un duelo a priori importante por el título de liga, contra el Atlético de Madrid (2-0). Eso sí, si no cambian las cosas, dudo que los azulgrana puedan pelear por el campeonato.

Un duelo en el que una de las claves fue la diferencia de intensidad entre los dos equipos. Y sobre todo, la que marcaron Lemar, Joao Félix y Luis Suárez. Especialmente fino anduvo el luso, que volvió loco a Mingueza durante la primera parte. De un gran movimiento suyo y un pase perfecto del uruguayo nació el 1-0, obra del tercero de este tridente.

No muy distinto fue el segundo gol, aunque esta vez fue Lemar quien conectó con Luis Suárez. Con absoluta tranquilidad, el 'pistolero' ajusticiaba a sus ex, a los que pidió perdón tras marcar. El partido quedaba visto para sentencia de cara a la segunda parte.

Una segunda parte en la que los azulgrana tuvieron mucho más la posesión, sí, pero tampoco generaron apenas peligro sobre la meta de Oblak. Un disparo franco de Coutinho lo atajó el esloveno. La entrada de Ansu, el mejor de los suyos junto a Gavi, dio movilidad al ataque. Es bueno ver que el chico ha entrado tan bien después de 10 meses lesionado, pero no se le pueden pedir milagros.

La situación en el club sigue siendo muy mala, aunque Koeman (hoy en la grada) fue ratificado por Laporta antes del partido. Desde luego, si las cosas no cambian de manera radical tanto en el juego como en la actitud, la temporada se les va a hacer eterna a los azulgrana.