Violencia, crecimiento de casos de Covid-19 y poco lugar para el fútbol: ¿es momento de suspender la Copa América?
Por Eitan Benzaquén
Cada vez falta menos para la Copa América y el contexto es realmente complicado. Los países organizadores viven crisis profundas y el panorama no es alentador para pensar en organizar la competición.
Colombia tiene a la gente en las calles protestando, luego de la reforma tributaria y la policía está reprimiendo de la peor manera. Denuncian que ya hay 26 muertos y hay un clima de muchísima tensión. Ya se suspendieron los partidos de Libertadores y Sudamericana de esta semana y se abrió la incógnita para lo que se viene.
En la Argentina hay una escalada de casos de coronavirus y en el país aumentan las restricciones. Esto llevó a la discusión sobre si es momento de organizar la Copa América y recibir a los jugadores de todos los países. No faltaron los rumores sobre abandonar la organización, pero nada fue confirmado.
El resto de la región vive una situación similar. Basta con ver lo que ocurrió con los jugadores de Independiente en el aeropuerto de Bahía, donde aparecieron casos positivos y fueron realmente maltratados. O el caso de Esteban Andrada en Ecuador, que deberá quedarse en Guayaquil realizando los 14 días de cuarentena por tener Covid-19.
Planteles con grandes brotes, jugadores que vendrán desde el fútbol europeo para estar en nuevas burbujas y el riesgo que implica organizar este evento. Por la situación sanitaria y social, no parece ser momento de jugar una Copa América.
Dicen que el show siempre debe continuar, pero ni la Argentina ni Colombia cuentan con las garantías necesarias para llevar a cabo la competición. ¿Es realmente necesario o se puede esperar a que la situación esté más tranquila? Lo cierto es que hay un negocio detrás y harán todo lo posible por jugarlo. ¿Vale la pena o es momento de ordenar las prioridades de los países?