Willy Caballero: "Me identifico con Emi Martínez y Marchesín porque cuando jugué en Málaga tampoco me reconocieron"
Por Diego Yudcovsky
El 27 de enero de este año marcó un antes y un después en la temporada 2020/21 del Chelsea. Ese día, Tomas Tuchel asumió la dirección técnica del equipo, en reemplazo de Frank Lampard, toda una leyenda de los "Blues", quien no lograba el rendimiento que dirigencia e hinchas pretendían.
Desde su llegada, el germano no ha conocido la derrota al frente del Chelsea, ya lo ubicó en la cuarta posición de la Premier League y espera con expectativas el cruce de cuartos de final de la Champions League, ante el Porto.
Desde las afueras de Londres, a unos 40km aproximadamente, Willy Caballero atendió amablemente a 90min, para una charla que tuvo de todo: la competencia en el arco de Chelsea, qué significó ser dirigido por Guardiola, el recuerdo del Málaga que alcanzó cuartos de final de Champions y lo que significó para él enfrentar a Lionel Messi. A su vez, recordó su paso por Boca y la medalla de oro en los J.J.O.O de Atenas 2004.
Como mencionábamos, el Chelsea se encuentra en pleno ascenso en la Premier League, sin dudas la competición más igualada del planeta. El cuarto puesto actual lo posiciona en puestos de Champions League, aunque a 20 puntos del imbatible Manchester City de Pep Guardiola.
¿Quedó muy lejos el City para pelearle la competición?
Sí, ya está muy lejos. Nosotros pasamos por un cambio de entrenador, perdimos muchos puntos al inicio. Ahora estamos mejor pero con la diferencia que el City nos lleva a varios que lo perseguimos, resulta difícil. Ya demostraron que cuando tienen esa ventaja son implacables para conseguir la Premier.
¿Cómo sentiste la salida de Frank Lampard? ¿Le pudo costar la idolatría?
Tanto para él como para nosotros fue duro. El equipo lo armó él con las incorporaciones, estabamos jugando bien, habíamos conseguido el famoso clean sheet (portería imbatible). A mitad de temporada empezó a cambiar todo y tanto el presidente como el club decidieron que venga otro técnico. Sobre todo fue difícil para los jóvenes que tuvieron que convivir por primera vez con un cambio de entrenador. El cambio fue abrupto e intenso, pero los resultados manifestaron que son los que mandan en el fútbol.
¿Qué cosas destacás de Tuchel y qué diferencias notás en relación a la etapa con Lampard?
Obviamente que hablar del técnico, lo que hace bien uno y lo que hace bien el otro, es incómodo. Porque por algo están, si nos toca tenerlos de entrenadores es porque son buenos. Te convencen del fútbol que quieren llevar a cabo y nosotros somos los trabajadores, los que llevamos ese plan a cabo.
Sin dudas que con Frank teníamos una idea más de juego directo, prácticamente de fútbol inglés. De atacar rápido, atacar por las bandas, tirar centros. O atacar por un lado y terminar por otro pero con bastante vértigo; era muy vertiginoso el fútbol que le gustaba, con movimientos rápidos de la pelota. Le gustaba también el ataque y contra ataque.
Ahora es un poco más de elaboración con Tuchel. Creamos más, nos dice prácticamente cómo se va a manifestar el partido, dónde están las claves de ellos, las buenas y las malas. Con sus ideas de cómo él viene haciendo jugar a sus equipos nos dice cuáles serían los jugadores que más tendrían que jugar de nuestro equipo para sacarle brillo a ese plan. A veces sale, a veces no, pero la idea de jugar, de crear juego, de hacer correr al otro equipo y todo eso, se está reflejando. Más allá del juego, ahora mismo en este fútbol moderno se manejan muchas estadísticas y demás y, si bien no le da mucha importancia a la posesión, sí a otras cosas que hacen ver que el equipo nuestro está siendo bastante superior al que nos toca enfrentar.
Para esta temporada, los 'Blues' ficharon a lo grande: Kai Havertz llegó proveniente del Bayer Leverkusen por 80 millones de euros; Timo Werner del Leipzig por 53 millones de euros; Ben Chilwell desde el Leicester City por 50.2 millones de euros; Hakim Ziyech del Ajax en 40 millones de euros; Edouard Mendy desde el Rennes en 24 millones de euros y Thiago Silva como agente libre de PSG.
¿Cómo viste la llegada de las incorporaciones? ¿El Chelsea está obligado a ganar algo esta temporada?
Por política del club está obligado a ganar algo. En los años que pude estar acá, siempre el equipo llegó a una final, la temporada pasada no ganamos nada pero perdimos dos finales y eso es lo que te hace estar cerca de llenar las vitrinas, el jugar finales. Obviamente que con la inversión que se hizo la idea era pelear la Premier también, una lástima que no se pudo encarrillar la seguidilla de partidos que hicimos ahora, al principio. Tanto Liverpool como Manchester City habían perdido puntos en esa parte y no pudimos sacar esa ventaja. Eso hizo que el City la recupere en la fecha 17°, 18°, ya estaban volando para esa jornada.
El Porto llega como una cenicienta a los cuartos de final de la Champions League. ¿Qué expectativas tenés para ese duelo y de qué cosas se deberá cuidar el Chelsea?
El Porto es un poco como lo fuimos nosotros en el Málaga. Aquel al que no sé si todos quieren enfrentar o lo ven asequible, pero por lo que demostró contra Juventus y en la fase de grupos es un equipo que tiene mucha disciplina, entonces va a ser difícil doblegarlo o superarlo porque también es verdad que aunque le quites la pelota o tengas solamente posesión, a ellos no les cambia nada. Defienden muy bien, se repliegan muy bien. El último partido hasta marcaban una línea de 6, a veces una línea de 7. Y hasta cuando tenían un hombre menos no se les escapó de las manos. Siempre estuvieron ahí haciendo lo que sabían y la idea que tenían.
El técnico es muy inteligente. Muchos jugadores hablan bien de él así que por algo será la idea y la concentración que les pone a los jugadores para llevar esa idea al campo. Nosotros ahora estamos bien, pero bueno, somos un equipo que cambió de entrenador así que tenemos que estar con los pies en la tierra de que ahora lo hicimos bien pero tampoco creernos que somos superiores a nadie. Tenemos que jugar contra ellos y volver a demostrarlo, como lo hicimos contra Atlético.
Hay muy buena competencia en el arco del Chelsea ¿Qué virtudes podés marcar de Kepa y de Edouard Mendy?
Por lo joven que es, Kepa tiene mucho para aprender y en estos años que estuvo en el Chelsea ya lo hizo mucho. Tiene gran dominio de juego de pelota con los pies, lo hace muy bien. Lo único que tuvo de malo fue el año pasado que tuvo un altibajo, porque el primer año fue increíble como atajó. Es un grandísimo arquero, prueba de ello es que estuvo hasta hace poco en la selección española. Tiene mucha potencia de piernas, buen despegue, se hace grande en situaciones uno contra uno.
Mendy era un desconocido para la Premier, pero es lo que pasa con arqueros que están en otras ligas. Tanto como él que lo estaba haciendo muy bien en la liga francesa como algunos argentinos que lo están haciendo muy bien en México, por ejemplo. A veces no se los aprecia porque le ponen comillas a las ligas. Hay que sacarse el sombrero con el Chelsea porque hizo muy bien en buscarlo a él y no a otro de renombre o con otro marketing. Tiene casi 2 metros, es muy grande, muy rápido y con mucha explosividad. Está agarrando más confianza y juega cada vez mejor con los pies, porque el fútbol que quiere Tuchel así lo requiere. Si el equipo sube la categoría, va a ser uno de los grandes a tener en cuenta.
"Me siento identificado con Emi Martínez y Marchesín, porque cuando estuve en Málaga, lo estaba haciendo bien y no me reconocieron"
- Willy Caballero
¿Te gustaría tener más regularidad?
Sé el lugar que tengo que ocupar, no puedo reclamar esa regularidad. Me la puedo reclamar a mí mismo cuando termine la temporada, porque va a finalizar mi contrato y puedo decidir lo que realmente quiera.
¿Te ves continuando en el Chelsea? Muchos optan por ir a la MLS a finalizar su carrera...
Todo es para analizar. En esta temporada tengo la posibilidad de pensar, porque en las últimas dos estaba atado a una cláusula de renovación automática, pero ahora puedo decidir conmigo mismo y mi familia. Voy a esperar a ese momento y ver qué ofertas vendrán.
Antes de fichar por el Chelsea en 2017, Caballero formaba parte de la plantilla del Manchester City, donde permaneció durante tres temporadas. Durante su estadía, en el último año, tuvo la posibilidad de ser dirigido por el mismísimo Pep Guardiola.
¿Qué cosas destacás de Guardiola?
Fue un año de mucho aprendizaje, tanto dentro como fuera del campo. No fue el mejor año de él, porque no conseguimos ningún título. Lo más importante para destacar es cómo él es capaz de ponerse tanto a la altura de un jugador de experiencia como uno joven para enseñarle. No sólo lo táctico sino de hablarle en todo tipo de situación. Enseñando, si no es el mejor, está cerca. En la carrera uno tiene entrenadores que enseñan gritando, mandando al frente, corrigiendo pero remarcando los errores. En ese sentido, Pep fue muy bueno a la hora de enseñar.
A principios de 2011, luego de casi 7 temporadas en el Elche, Caballero arribó al Málaga por la lesión de Sergio Asenjo, que en ese momento ocupaba la portería del club. Allí, Willy posee el récord de imbatibilidad de minutos sin recibir un gol en LaLiga: 479.
En la temporada 2012/13, bajo la dirección técnica de Manuel Pellegrini, los 'Albicelestes' alcanzaron algo impensado para la institución, los cuartos de final de la Champions League. En esa instancia fueron derrotados por el Borussia Dortmund, que luego finalizó como subcampeón del certamen.
¿Qué recuerdos tenés de aquella temporada?
Fue algo increíble. Pasaron bastantes cosas feas que nos hicieron conseguir el mejor grupo humano, porque empezamos la temporada con más de 20 jugadores y antes de la primera fecha quedaron 16, por la partida de varios. Antes de jugar la previa de la Champions, llegaron Roque Santa Cruz, Javier Saviola y varios más que se acoplaron bien. El año fue un orgullo para los simpatizantes de Málaga y doloroso por la forma en que quedamos eliminados por unos minutos y tocó volver con las manos vacías de Alemania.
En 2012 Messi marcó 91 goles. ¿Te tocó sufrirlo ese año? ¿Cómo es enfrentarlo?
Mirá, el otro día que repartieron las cervezas, a mí me llegaron unas cuantas, je. Me tocó enfrentarlo y me tocó sufrirlo, porque él va a cada partido para asesinarnos a los arqueros. A los arqueros, a los defensas, va a matar. Y matar significa hacer la mayor cantidad de goles posibles. No le importa si lo conocés, si sos argentino, si sos amigo. Después se queda hablando con vos y saludándote y todo lo demás, pero esos 90 minutos él tiene una misión: si puede llenarte a goles, te llena.
Cuando se enfrentaban Málaga y el Barcelona siempre había mucha diferencia y bueno, por ahí le emparejábamos el juego, porque nosotros jugábamos bien, pero ellos siempre tenían mucha más pegada que nosotros.
El buen nivel que muestran los arqueros argentinos semana a semana hace que Lionel Scaloni no la tenga nada fácil a la hora de seleccionar a dos (o tres) en cada citación. Cuando Caballero lo hacía de la mejor manera en Málaga, se lo criticó a Alejandro Sabella por no contarlo entre sus filas mientras fue entrenador de la celeste y blanca, entre 2011 y 2014. El que sí lo hizo fue Jorge Sampaoli, quien le otorgó la responsabilidad de atajar en los dos primeros encuentros del Mundial de Rusia 2018, ante Islandia y Croacia, respectivamente.
En la Premier la está rompiendo Emiliano Martínez. ¿Cómo lo ves?
Lo conocí un poco más el año pasado como persona. Me tocó enfrentarlo en la final del año pasado contra el Arsenal y me puso feliz su final de temporada. Lo felicité cuando tomó la decisión de salir de Arsenal para ir a Aston Villa porque no muchos tienen ofertas desde clubes importantes para irse a medianos o chicos y aceptan como lo hizo él. Sabés que al ir a un equipo así te van a patear y atacar mucho, pero le está dando muchos puntos al Villa. Si están tranquilos en la tabla, en gran parte es por él.
Si fueras entrenador de la selección argentina, ¿llevarías a un arquero por la efectividad en las veces que le llegan o por el nombre?
Argentina tiene muchas variantes, siempre va a recibir críticas el entrenador por quien convoca. 'Chiquito' Romero lo hizo genial en la selección e incluso así y todo fue muy criticado porque no estaba jugando en sus equipos y fue el último consolidado. Ahora lo está haciendo Franco Armani y viene bien. En Porto, Marchesín lo está haciendo muy bien.
Me siento identificado con Emi Martínez y Marchesín, porque cuando estuve en Málaga, lo estaba haciendo bien y no me reconocieron. A lo mejor tenés que pasar a un Manchester City o Chelsea, estar de suplente y por el nombre del club hace más ruido. Y no tiene que ser así, porque si vos estás en un grande sos bueno, pero en la liga mexicana hay muy buenos arqueros, pero por el nombre de las ligas o clubes se valora a unos y a otros no. Eso es lo que me duele. El otro día lo escuchaba a Marchesín y me siento un poco identificado con ellos también.
"En los 90 minutos Messi tiene una misión: si puede llenarte a goles, te llena"
- Willy Caballero
¿A qué tres arqueros llevarías a la Copa América?
No soy entrenador, no es mi trabajo. No veo a todos los arqueros argentinos, solo veo a algunos. Te puedo decir que Marchesín lo está haciendo muy bien, el 'Patón' Guzmán también en México. Mi colega en el Aston Villa (Emiliano Martínez) la está rompiendo toda. Tanto Armani como Andrada lo están haciendo bárbaro. Hay que dar gracias que tenemos una gran cantidad de buenos arqueros, que años atrás no había o no se reconocía tanto.
Willy surgió de las inferiores de Boca y permaneció en el club durante tres temporadas, aunque le costó gozar de continuidad porque el titular era el 'Pato' Abbondanzieri, quien es catalogado como uno de los mejores de la historia de la institución. Allí fue dirigido por Carlos Bianchi y se coronó campeón de la Libertadores e Intercontinental 2003 y el Torneo Apertura de ese mismo año.
¿Cómo fue ser dirigido por Carlos Bianchi?
A lo mejor no puedo tener la visión que tuvo el 'Pato' Abbondanzieri o algún otro jugador que haya jugado y disfrutado mucho con él. Carlos era uno de los mejores entrenadores que veía el fútbol, sabía los puntos débiles de los rivales, dónde podíamos hacer daño y tenía un ojo clínico excelente.
¿Cuáles son tus recuerdos de aquel 2003 que Boca consiguió absolutamente todo?
El debutar en primera es uno de los recuerdos más lindos para un futbolista. Hice todas las inferiores en Boca y terminar defendiendo los colores de la camiseta tanto de local como visitante fue lo más lindo, porque cuando sos chico lo deseás. Pasó muy rápido, vivir en Boca es una vorágine constante con una alta exigencia. Se aprende mucho, con jugadores de experiencia que te ayudan bastante. Lo que tiene Argentina es que se concentra mucho antes de cada partido y hace que no veas tanto a tu familia.
¿Qué cosas aprendiste del 'Pato' Abbondanzieri en tu etapa en Boca?
Lo primero para rescatar del 'Pato' es su personalidad, su optimismo y su forma de ser para ser protagonista en el vestuario primero y generar así un ambiente divertido y entretenido. Entonces, la personalidad ya es para destacar. Le tocó agarrar un arco difícil, si bien él ya estaba hace muchos años y había ganado cosas, la huella que había dejado Óscar Córdoba era muy grande con lo que consiguieron. Y él, partido a partido o muy despacio, sin hacer mucho ruido, se fue ganando al equipo, a la gente y empezó a tener actuaciones muy buenas para su tranquilidad y para mantener una regularidad excelente.
Después, a eso, sumándole que mejoró un montón pegándole a la pelota, que muchas veces le dieron puntos a Boca porque el golpeo de pelota que tenía el 'Pato' fue uno de los mejores para ese momento. Entrenar con él, que estaba siempre de buen humor, hace que con todas las horas que pasás viajando, terminás conociéndolo mejor y te da esa seguridad de que es muy bueno, muy noble y le gusta como a todos el jugar, el ganar, pero con mucha sencillez y con mucha calma también.
Compartiste en aquella etapa plantel con Carlitos Tevez, no sólo en Boca, sino también en la selección Sub-20. ¿Cómo lo veías en ese momento y cómo lo ves hoy ya siendo un jugador consagrado?
Me tocó verlo en todas las inferiores. Ver lo que hacía era increíble, llamaba la atención en cada partido que jugaba. Siempre teníamos el mini estadio lleno de gente que iba a ver las futuras promesas y todo el mundo hablaba de lo que hacía él y lo que podía ser en el futuro. Cuando subió a primera, viendo lo que hizo, fue prácticamente volver a ver lo que hacía en inferiores. No sentía la presión de jugar en primera, lo disfrutaba y asumió el rol que había dejado nada más y nada menos que Riquelme. Si bien estaban grandes al lado como Guillermo Barros Schelotto y el 'Chelo' Delgado, él estaba creciendo y asumiendo ese rol que fue increíble para que ganemos esos títulos. Me lo crucé cuando estuvo en Juventus y se lo notaba diferente en personalidad. Lo vi en los últimos partidos en Boca y, si bien cuando sos más grande tu físico te cambia, su entrega sigue siendo como si estuviera jugando un partido en el barrio.
¿Qué sentís que le falta a la selección para volver a lograr esos títulos con planteles juveniles?
Toda esa camada de jugadores que jugó tanto los JJ.OO. como los Mundiales previos, la desarrolló prácticamente José Pekerman. Todos los que estuvimos tanto en 2004 como los de 2008, pasamos en algún momento por José. No sólo las selecciones, sino también los clubes desarrollaban jugadores de buena manera. De un tiempo a esta parte, cada vez los jugadores se fueron más jóvenes de Argentina, sin estar más de un año y medio o dos en sus equipos. Muchos de esos no migraban a buenas ligas, sino poderosas económicamente y en ese sentido, sumado a otros valores, hizo que no se generara esa gran selección.
Pasemos al ping pong. ¿Top tres de arqueros de la actualidad?
Manuel Neuer, Marc-André Ter Stegen y Emiliano Martínez.
¿Los tres mejores arqueros de la historia?
Peter Schmeichel, ahora tuve la posibilidad de jugar contra el hijo y le dije que era mi ídolo; obviamente Óscar Córdoba; Iker Casillas tuvo unos siete u ocho años en los que no sabía que iba primero, si Casillas o el Real Madrid, fue un ícono.
¿El delantero que más sufriste?
Sin duda a Leo Messi. Otro más que podría decirte es Robert Lewandowski, que gracias a dios lo enfrenté pocos partidos porque es un animal.
¿El fútbol qué significa para vos?
Es lo que me hace feliz. Los títulos no me dan tanta felicidad como abrazar a mi familia cada vez que me toque jugar. Esa es mi mayor alegría.
¿Tu once ideal de compañeros? Puede ser de amigos, pero obvio que vos vas al arco...
Yo; Pablo Zabaleta, Martín Demichelis, Nicolás Burdisso, César Azpilicueta, Marcos Alonso; Enzo Maresca, Cesc Fábregas; Santi Cazorla, Kun Agüero, Diego Buonanotte.
¿Vas a seguir ligado al fútbol?
Por unos años más sigo pensando en fútbol, quiero seguir jugando. También tengo ganas de hacer curso de entrenador, para estar preparado, no para seguir en esto. Sirven para ver y pensar diferente, a veces los jugadores creemos tener la verdad y en ese sentido puede servir aunque no lo lleves a la práctica después. No tengo miedo al después del fútbol, va a ser un desafío lindo con más tiempo para disfrutar de la familia. No tengo ansias que llegue, quiero disfrutar esta carrera lo más que pueda.